Las facturas de gas volverán a aumentar en todo el país. El Gobierno oficializó este lunes un nuevo incremento del recargo destinado a financiar el régimen de subsidios para las zonas más frías de la Argentina. A través de la Resolución 718/2025, publicada en el Boletín Oficial, el Ministerio de Economía elevó del 6% al 6,2% el porcentaje que se aplica sobre el precio del gas natural en el Punto de Ingreso al Sistema de Transporte (PIST), uno de los componentes clave de la tarifa.

La medida impacta en todos los usuarios del sistema, sin importar la categoría ni la ubicación geográfica, ya que el recargo se traslada por igual a la totalidad de las boletas. Según la normativa, el Ente Nacional Regulador del Gas (ENARGAS) deberá ajustar los procedimientos de facturación para que las distribuidoras apliquen el nuevo cargo a partir de este mes.

El incremento busca reforzar el Fondo Fiduciario para Subsidios de Consumos Residenciales de Gas, creado en 2002 por la ley 25.565. Ese fondo financia parte del costo del servicio en regiones con temperaturas más bajas, como la Patagonia, el sur de la provincia de Buenos Aires y algunas zonas de Cuyo. En esas áreas, los usuarios reciben un descuento de hasta el 50% en sus facturas.

Al fundamentar el ajuste, el Ejecutivo señaló que “se espera una mayor necesidad de fondos para financiar el régimen de compensaciones”, y agregó que el cambio busca cubrir también el efecto financiero que se genera entre el momento de entrada en vigencia del nuevo recargo y su impacto efectivo en la recaudación.

El nuevo porcentaje del 6,2% se aplicará tanto sobre el consumo habitual como sobre el autoconsumo de las empresas distribuidoras y comercializadoras de gas. La resolución instruye a las comercializadoras a trasladar de forma exacta el recargo sobre cada metro cúbico de gas natural adquirido en el PIST, calculado sobre una base de 9300 kilocalorías.

Este ajuste forma parte del proceso de reestructuración del esquema de subsidios energéticos iniciado por el Gobierno de Javier Milei. La política apunta a una progresiva focalización de la asistencia estatal, concentrando los subsidios en los sectores de menores ingresos. El decreto 370/2025 prorrogó hasta el 9 de julio de 2026 la emergencia energética y el “Período de Transición hacia Subsidios Energéticos Focalizados”, con el objetivo de avanzar hacia una estructura tarifaria más alineada con los costos reales del sistema.

En paralelo, también se confirmaron aumentos en las tarifas eléctricas. La Secretaría de Energía oficializó una suba del 2,6% en las boletas de electricidad a través de resoluciones del Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE). En el caso del gas, se espera que el ENARGAS haga lo propio en los próximos días, con un ajuste que irá del 2,6% al 2,8%, según fuentes oficiales.

La cobertura del costo de abastecimiento de gas para los hogares pasó de representar el 18,7% en enero de 2024 al 74,5% en marzo de 2025, lo que implica que el Estado aún subsidia el 25,5% restante. En el caso de la electricidad, la cobertura es del 100% para los usuarios de ingresos altos (Nivel 1), del 45,68% para los de ingresos medios (Nivel 3) y del 29,97% para los de menores ingresos (Nivel 2).

Según datos de la consultora Economía y Energía (EyE), los subsidios energéticos totalizaron USD 604 millones en el primer cuatrimestre del año. Esta cifra representa una caída del 66% en comparación con el mismo período de 2024, cuando se habían destinado USD 1.675 millones. El recorte significó un ahorro de USD 1.071 millones.

En este contexto, el Gobierno reafirmó que “la política de mantener un esquema de subsidios generalizados y crecientes en el tiempo implementada a través de los aportes del Tesoro Nacional resulta incompatible con la situación financiera por la que atraviesan las cuentas públicas”. La decisión de incrementar el recargo forma parte de ese viraje: menos aportes del Estado, más contribución directa en las boletas.