Google está transformando su buscador en una plataforma impulsada por inteligencia artificial. La nueva modalidad AIMode integra respuestas generadas por IA directamente dentro de los resultados, mezclando lo mejor de la búsqueda tradicional con la potencia de la comprensión semántica.

El impacto para las marcas es enorme. “AIMode marca el comienzo de una nueva etapa: el SEO deja de centrarse en el ranking y pasa a enfocarse en la relevancia y en la capacidad de ser comprendido por los sistemas de inteligencia artificial”, explica Sebastián Querelos, consultor SEO y especialista en posicionamiento orgánico con más de dos décadas de trayectoria internacional, reconocido por haber acompañado procesos de crecimiento y transformación digital en compañías líderes de distintos sectores. Desde su experiencia, promueve una visión de la adquisición orgánica como un eje central del crecimiento empresarial, un aspecto que muchas compañías subestiman o dejan de lado al planificar su estrategia digital.

Para Sebastián Querelos, la irrupción de la inteligencia artificial consolida un cambio de paradigma que él viene planteando hace tiempo: del Search Engine Optimization al Search Everywhere Optimization, donde la visibilidad de una marca depende de su capacidad para ser comprendida en todos los entornos digitales.

“Las marcas ya no pueden pensar en optimizar solo para Google. Los usuarios buscan en todas partes: en TikTok, en YouTube, en Gemini, en ChatGPT o directamente con voz. Y cada plataforma tiene su propio lenguaje y su propio público: no es lo mismo hablarle al usuario joven de TikTok que al consumidor que compara productos en Instagram o busca información técnica en YouTube. El desafío es estar presentes en todos los entornos donde ocurre la búsqueda, pero con mensajes y formatos pensados para cada audiencia.”

Del clic al contexto

Con AIMode, Google deja de ser un simple intermediario de enlaces para convertirse en un intérprete de información. Las empresas que antes competían por una posición en la primera página ahora deben lograr que su contenido sea utilizado como fuente en las respuestas generadas por la IA.

“Las marcas van a tener que aprender a hablar el idioma de la inteligencia artificial. Ya no alcanza con tener keywords o backlinks: hay que ofrecer contexto, estructura y credibilidad.”

Esta nueva dinámica también modifica la manera en que se mide el éxito. El clic pierde protagonismo frente a métricas más cualitativas, como la frecuencia con la que una marca es mencionada, citada o sintetizada por los modelos de IA.

Menos pauta, más estrategia

El cambio tecnológico llega en un momento clave para las empresas. Los costos de la publicidad digital aumentaron de forma sostenida en los últimos años, y la efectividad de los anuncios pagados comienza a saturarse.

“Las compañías líderes están recurriendo al SEO como una herramienta para bajar costos y mejorar márgenes. AIMode acelera ese movimiento, porque las marcas que logren ser comprendidas y citadas por la IA tendrán visibilidad orgánica sin depender de la pauta”, sostiene Querelos.

Y agrega: “Para mí, el SEO nunca fue un gasto de marketing, siempre fue una inversión. Pero no todas las empresas lo entienden ni lo valoran. Ahora van a tener que hacerlo: o incorporan un consultor SEO, o forman un equipo in-house, o trabajan con una agencia especializada. Pero el SEO tiene que estar dentro de la estrategia sí o sí, porque quien no lo tenga va a quedar fuera.”

Fintech, banca y e-commerce: los que más sienten el cambio

Los sectores que más rápido perciben el impacto de AIMode son los que operan en entornos de alta competencia y confianza: banca, fintech y e-commerce.

En el mundo financiero, la IA de Google puede responder consultas complejas, comparar productos o resumir condiciones. “Si una marca no está bien posicionada a nivel semántico, la IA simplemente no la ve. Y en ese escenario, dejar de aparecer no significa perder clics: significa desaparecer de la conversación.”

En e-commerce, el desafío es similar. “El usuario ya no entra a buscar un producto: entra a resolver una necesidad. AIMode puede mostrar directamente comparativas, reseñas o análisis de opciones. Las empresas que no trabajen su contenido para ser parte de esas respuestas van a perder visibilidad sin siquiera saberlo.”

La optimización en la era de la IA

Para adaptarse a esta nueva realidad, Sebastián Querelos propone repensar el SEO desde una visión integral. “Search Everywhere Optimization significa entender que la búsqueda ya no vive en un solo lugar. Hay que optimizar para buscadores, para IA, para redes y para cualquier entorno donde un usuario formule una pregunta.”

Esa optimización integral incluye tres pilares:

1. Claridad semántica: contenido estructurado y comprensible para humanos y máquinas.

2. Autoridad de fuente: reforzar la confianza a través de señales de experiencia, consistencia y reputación.

3. Ecosistema conectado: lograr que la marca tenga coherencia en todos los espacios digitales donde se genera información.

De la visibilidad a la influencia

Para Querelos, el cambio más profundo no está en la tecnología, sino en la mentalidad. “Durante años, el SEO fue una competencia por posiciones. Hoy es una competencia por interpretación. AIMode y la IA en general no buscan quién habla más fuerte, sino quién aporta más valor y claridad.”

Con la llegada de Google AIMode, el SEO se expande hacia un territorio donde la visibilidad no se compra ni se mide en clics, sino que se construye desde la confianza, la calidad y la capacidad de generar respuestas útiles.
“Las marcas que entiendan esto van a tener una ventaja enorme. No se trata de ganarle al algoritmo, sino de entenderlo. Porque en la nueva era de búsqueda, el SEO ya no es optimizar para un motor: es optimizar para la inteligencia.”