Retoman negociaciones

Paro de actores en Hollywood: consecuencias más allá de los Estados Unidos

El complejo internacional del negocio audiovisual ya está viviendo restricciones por el paro de actores en Hollywood, que vuelve a negociar una salida desde hoy y que no sólo ha cambiado fechas de estreno sino que dificulta la promoción de productos dentro y fuera de los Estados Unidos.

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Desgraciadamente, el tema sigue siendo el paro de actores en Hollywood, cuyas implicancias son globales en la medida en que el desarrollo del audiovisual estadounidense sostiene la demanda del sector en todo el mundo. Pero hoy la gran producción permanece parada mientras se ha vuelto a la conversación entre los representantes de los intérpretes (el sindicato SAF-Aftra) y los productores. En casi todo hay un acuerdo excepto en el punto más importante: cuánto cobran los actores por la difusión fuera de los EE.UU. de su trabajo en las plataformas. Para darse una idea, en 2022, con un incentivo, cobraron 126 millones de dólares. Eso es más de lo que recaudan por cine pero menos de lo que cobraron por el paso en cable y TV de aire. En un momento en el que casi todo pasa por el streaming, resulta bastante extraño.

Las consecuencias, se dijo, son globales. El lector habrá notado que la publicidad en las calles de Buenos Aires de la miniserie Nada, de Star+, tienen una foto de Luis Brandoni, el protagonista. Pero no hay imágenes del coprotagonista y narrador de la historia, que aparece en todos los episodios: Robert De Niro. La razón: De Niro, como miembro de SAG-Aftra, no puede promocionar sus trabajos mientras dure la huelga. Tampoco pudo promocionar Los asesinos de la luna dentro o fuera de los Estados Unidos (aunque sí en Cannes, porque el festival fue anterior al paro). Ni lo hizo Leonardo Di Caprio. 

Esto es sólo una parte. La otra son los retrasos. Paramount Pictures acaba de pasar Missión Imposible 8 de junio de 2024 a mayo de 2025. La razón: faltan muchas escenas actuadas y no se pueden hacer. Lo mismo sucede con Un lugar en silencio: Día uno, precuela de la exitosa serie de terror. Los cambios de agenda son constantes y eso también modifica la difusión. Pero sobre todo no hay material. De allí que las negociaciones sean imperiosas y que los representantes de los actores se muestren optimistas respecto de sus demandas.

El gran problema entonces es la línea de montaje, completamente detenida. Aunque los estudios propusieron en la última conversación un "incentivo" a los actores por cantidad de visualizaciones -algo así como premio por rating, un mecanismo que solucionó el paro de guionistas- los actores propusieron un incremento extra en las suscripciones de 57 centavos de dólar para generar el fondo de 500 millones de dólares que reclaman. En ese punto está todo el problema, pero es probable que en estos días se acerquen posiciones. Si no, los cines especialmente se enfrentarán a una nueva crisis cuando aún no se han recuperado de la pandemia.

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