IMAX, la empresa responsable de los cines de pantalla gigante, mostró muy buenos resultados ante los accionistas de Wall Street tras el segundo trimestre de este año. Sus ganancias crecieron un 6,6% -en total, tuvo beneficios por u$ 104,8 millones- y eso implicó una suba de sus acciones del 4,4%. La verdadera razón de esta suba, aún cuando el negocio de la pantalla hipergigante es uno de los que mejor funcionan actualmente dentro del espectro del cine, consiste en el éxito global de Avengers-Endgame (que agotó entradas para las salas IMAX en casi todos los territorios donde está presente) y en el crecimiento de la asistencia en salas en China, donde además esa película fue un enorme éxito, pero que también funciona con contenido local de formato gigante.

El mercado chino, con su enorme crecimiento constante, favorece los balances de la empresa

Esto marca claramente cuál es la tendencia para el cine y por qué los grandes estudios apuestan casi todo a los espectáculos gigantes. Aunque la narrativa y los personajes siguen siendo importantes, es igualmente importante la sensación, el "estar ahí" que hoy proveen sobre todo las salas IMAX (en la Argentina aún hay solo una, en el Showcase de Vicente López). El espectador paga, sobre todo, por la sensación inmersiva y por la fantasía desatada. O, más bien, por la conjunción de ambas. Nunca como ahora eso se vio tan bien, y los números que maneja IMAX, que no ha tenido un crecimiento global tan extenso como podría dado el grado de inversión que implica construir una sala con pantallas de diez pisos de altura, demuestran que el futuro del espectáculo en salas pasa por el gigantismo.

Respecto de China, la empresa anunció que fue el mercado que mejor funcionó y estuvo casi un 29% por encima de las expectativas que se esperaban en el balance de mitad de año. Esto se debió sí a la buena performance en ese territorio de Avengers, pero también al enorme estreno del primer largometraje de animación totalmente realizado en ese país, Ne Zha, que llenó las salas. En general, en otros territorios, la animación en IMAX no funciona igual de bien, pero esta excepción le permite a la empresa tener números más sólidos de los previstos.

También dio buenos números el éxito global de Avengers: Endgame, que agotó entradas en IMAX

En cuanto a cantidad de salas, actualmente IMAX cuenta con 1445 en todo el mundo, lo que también impl,ica un crecimiento del 10%. Cuarenta de esas salas nuevas se abrieron en China y otras quince en Europa, lo que también muestra la importancia notable del mercado asiático. La firma cree que los gastos operativos no superarán los del año pasado, de u$ 110,7 millones, y que al terminar el año habrá alrededor de 180 sistemas nuevos, entre edificios especialmente construidos y adaptación de salas ya existentes.