La hispana Mediapro se lanza como estudio de contenidos
Una cuña ante la concentración del negocio
El negocio del presente, ante la enorme concentración que existe entre los medios que difunden contenidos, es el de crearlos. Una noticia importante sacudió el campo del audiovisual la semana pasada: la empresa española Mediapro, una de las más importantes en la producción de cine, series y diferentes formatos, se constituyó en estudio, The Mediapro Studio. Y anunció al mismo tiempo que desarrollará en 2019 34 series desde su cabecera en Barcelona, donde ya tiene diez oficinas creativas trabajando.
Mediapro es socia en una innumerable cantidad de producciones audiovisuales en todo formato e incluso ha logrado desarrollar franquicias exitosas (es una de las productoras de El joven Papa, la notable serie de Paolo Sorrentino con Jude Law), algo difícil fuera de los Estados Unidos. Convertirse en estudio implica ser un creador constante de contenidos para quienes tienen hoy los medios. El problema de la concentración -la compra de Fox por Disney es el ejemplo máximo pero no el único- consiste en que gran parte de la energía de los que antes fueron estudios se disipa en la construcción de redes, la distribución y la exhibición. Hace algunas semanas, Variety editorializaba al respecto y decía que el nuevo ecosistema permite el surgimiento de productores de contenidos. El lanzamiento de Mediapro está en consonancia con ese nuevo paisaje en el desarrollo de los medios.
En la actualidad los estudios Mediapro están colaborando en sus proyectos creadores de la talla de David Simon (creador de The Wire), Àlex y David Pastor, Javier Olivares, Ran Tellem, Daniel Burman, Diego San José, Fernando González Molina o Iván Escobar, entre otros. Este potencial la ubica dentro de lo más importante del negocio en habla hispana.