Warren Buffett desafía la tormenta y apuesta fuerte en una empresa con una crisis histórica
Berkshire Hathaway compró 5 millones de acciones de UnitedHealth, golpeada por costos médicos récord, un ciberataque masivo, investigaciones y el asesinato en Manhattan
Warren Buffett volvió a mirar hacia un viejo conocido. Berkshire Hathaway, el conglomerado que dirige el carismático nonagenario apodado el “Oráculo de Omaha”, adquirió 5,04 millones de acciones de UnitedHealth Group, operación valorada en unos 1.550 millones de dólares, según los registros presentados ante la Comisión del Mercado de Valores (SEC). La noticia impulsó las acciones de la aseguradora de salud un 7% en las transacciones posteriores al cierre de Wall Street.
Buffett había mantenido una posición de alrededor de 1,18 millones de acciones entre 2006 y 2009, pero la vendió por completo en 2010, en el marco de un repliegue más amplio de las inversiones en aseguradoras de salud. Su regreso se da en un contexto especialmente adverso para UnitedHealth, que enfrenta una combinación de crisis sin precedentes: costos médicos en alza, investigaciones federales, la mayor filtración de datos sanitarios en la historia de EEUU y las consecuencias del asesinato de Brian Thompson, exdirector ejecutivo de UnitedHealthcare, ocurrido el 4 de diciembre en la puerta del Hilton en el centro de Manhattan.
El crimen tuvo lugar antes de una reunión anual con inversores y, en menos de un mes, el precio de la acción cayó de 610 a 510 dólares, una pérdida de 63 mil millones de dólares en capitalización de mercado.
A este episodio se sumó el impacto de un ciberataque revelado en febrero de 2025 contra Change Healthcare, filial tecnológica de la compañía, que afectó a 192,7 millones de personas, interrumpió el procesamiento de reclamaciones médicas en todo el país y es considerado la mayor filtración de datos sanitarios registrada en la historia estadounidense.
Desde enero y hasta la fecha de la operación de Warren Buffett, las acciones de UnitedHealth acumularon un retroceso del 46%.
El movimiento del “Oráculo de Omaha” forma parte de una serie de ajustes en la cartera de Berkshire Hathaway: la firma también incorporó posiciones en el fabricante de acero Nucor, la empresa de publicidad exterior Lamar Advertising, la compañía de seguridad Allegion y regresó al capital de constructoras como Lennar y DR Horton. En paralelo, se desprendió totalmente de sus acciones en T-Mobile US y redujo sus participaciones en Bank of America y Apple.
En mayo, la junta directiva de Berkshire designó por unanimidad al canadiense Greg Abel como futuro presidente y consejero delegado, en reemplazo de Buffett, después de que este anunciara su intención de dejar ambos cargos.