Policías franceses amenazan con medidas de fuerza si no se atienden sus reclamos
Los integrantes de los cuerpos de seguridad reclaman el pago de un adicional durante los próximos Juegos Olímpicos y mejores condiciones de trabajo
Los policías franceses amenazan con interrumpir la actividad en los aeropuertos durante los Juegos Olímpicos de París, si no se atienden sus demandas salariales y de condiciones de trabajo dignas.
Los agentes de las fuerzas del orden marcharon en la capital francesa y en otros lugares exigiendo respuestas al Ministerio del Interior sobre su petición de una "prima olímpica" de 2.000 euros (2.174 dólares) y garantías de que se aprobarán "medidas sociales" para sus familias, en particular sobre el cuidado de los niños durante el verano boreal.
"Causaremos miedo (si no se atienden nuestras demandas)", dijo Chafia Boutara, secretaria administrativa del sindicato Alliance Police a medios internacionales, mientras una docena de policías se manifestaban y encendían bengalas azules frente al ayuntamiento de París.
"Habrá acciones más duras. Bloquearemos los aeropuertos con agentes que tardarán no tres minutos, sino 25 en comprobar los pasaportes. Entonces van a ver cómo el jefe del Aeroport de Paris levanta el teléfono y llama al gobierno", remarcó.
Movilizados
La semana pasada, agentes de policía desfilaron en autobuses descubiertos por París para presionar a las autoridades y que aceleren las conversaciones sobre las condiciones laborales y salariales durante los Juegos, que tendrán lugar del 26 de julio al 11 de agosto.
En plenas fiestas nacionales, los Juegos Olímpicos supondrán una carga adicional de trabajo para la fuerza policial de París, en un contexto de mayores amenazas a la seguridad y de escasez crónica de personal en fuerzas de seguridad, hospitales y el transporte público.
Se estima que unos 30.000 policías y soldados serán movilizados para garantizar la seguridad de la ceremonia inaugural del 26 de julio, cuando se espera que unas 500.000 personas vean a los atletas y las delegaciones navegar por el río Sena.
"Servimos al Estado. Queremos que los Juegos Olímpicos sean un éxito, pero las autoridades han hecho oídos sordos a nuestras reivindicaciones", dijo Mickael Vinard, jefe del sindicato de policías forenses.