El expresidente de Estados Unidos, Barack Obama, criticó duramente a Donald Trump y destacó la importancia de la unidad y la lucha por el futuro de los estadounidenses, además de apoyar a la proclamada candidata demócrata a la presidencia, Kamala Harris.

Lo hizo durante su discurso en la segunda noche de la Convención Nacional Demócrata, en el que Obama se dirigió a la multitud con un mensaje claro: “¡Sí, ella puede!”, en una adaptación del slogan que marcó su propia campaña presidencial en 2008. Por otra parte, Obama señaló que Trump, pese a ser multimillonario, "no deja de quejarse de sus problemas".

 

Futuro

Durante su intervención, Obama ofreció a sus colegas demócratas una nueva estrategia para enfrentarse a Trump, usando un tono irónico y sarcástico. Después de preguntarse “quién luchará por el futuro de los estadounidenses”, el ex mandatario remarcó: "Una cosa es segura: Donald Trump no está perdiendo el sueño por esa pregunta". La frase fue recibida con risas y aplausos por parte de los asistentes.

El expresidente abogó por la unidad de un Estados Unidos profundamente dividido, de cara a una dura contienda electoral entre Kamala Harris y Donald Trump. "Lo que ansiamos es volver a un país en el que podamos trabajar juntos", afirmó, subrayando la necesidad de superar la polarización actual.

 

Testimonio

Obama también se burló de la obsesión de Trump con el tamaño de las multitudes y sus "apodos infantiles", desatando carcajadas en la audiencia. "No necesitamos cuatro años más de torpeza y caos", advirtió Obama, alertando que la elección del 5 de noviembre será crucial para "la restauración de nuestros lazos de afecto", en referencia a las palabras de Abraham Lincoln durante la Guerra Civil.

Barack Obama cerró su discurso subrayando que la lucha por el país apenas comienza: “El testimonio ha pasado de manos. Ahora es hora de pelear por el país en el que creemos”.

 

Michelle

Por su parte Michelle Obama, quien habló antes que su esposo, ofreció un discurso entrelazado con esperanza y acción, afirmando que "Estados Unidos, la esperanza está de vuelta". La ex primera dama fue recibida con una estruendosa ovación y destacó que en noviembre, los ciudadanos tienen "el poder de juntar nuestra esperanza con la acción".

La ex primera dama anticipó que los republicanos encabezados por Trump comenzarán a cuestionar a Kamala Harris al igual que lo hicieron con ella y el expresidente Barack Obama, intentando que la población les "temiera" por ser "personas trabajadoras, con un alto nivel educativo y exitosas que, además, eran negras”.