La calificadora de riesgo crediticio Fitch Ratings recortó drásticamente su pronóstico de crecimiento económico para América Latina y el Caribe en el corriente año a un 0,7% desde el 1,9% que había estimado en el segundo trimestre de este año.

La calificadora aseguró que persisten las presiones bajistas para las calificaciones soberanas en la región, lo que refleja un entorno macroeconómico más débil.

Según la agencia, la perspectiva de crecimiento para América Latina y el Caribe se ha deteriorado en los últimos meses ante los persistentes contratiempos externos, en medio de una guerra comercial entre Estados Unidos y China que genera nuevos desafíos para la región, y las incertidumbres políticas internas.

"Lo anterior aumenta los desafíos que muchos países enfrentan para consolidar las cuentas fiscales y estabilizar las cargas de deuda pública", aseguró Fitch en un reporte dado a conocer en las últimas horas.

Persisten las presiones bajistas para las calificaciones soberanas en la región

"Un crecimiento mundial y chino más lento así como la volatilidad en los precios de las materias primas, vinculadas en parte a las persistentes incertidumbres relacionadas con el proteccionismo comercial, es un desafío externo clave para América Latina", según los especialistas de Fitch.

"Los efectos negativos derivados de la profundización de la crisis argentina y las incertidumbres políticas de reformas específicas de cada país también pesan sobre la confianza doméstica y la actividad en los países vecinos", agregó el texto de la calificadora de riesgo crediticio.

Para Fitch, el impulso para realizar reformas económicas y fiscales necesarias para impulsar el crecimiento de la productividad e incrementar la inversión, reducir los déficits y estabilizar la deuda pública en varias grandes economías es en estos momentos limitado.

A modo de ejemplo, señala que la crisis generada en Argentina plantea interrogantes sobre la dirección de la política en el país y la marcha de la implementación del programa del FMI. La nota "CC" refleja que es probable otro evento crediticio en el país, indicó.

Mientras que Brasil ha tenido avances para aprobar una reforma de pensiones clave para el gobierno, pero considera que se necesitan otras medidas fiscales para mejorar el panorama de las finanzas públicas a corto plazo. Y la rebaja en junio de México a "BBB" refleja la incertidumbre en la política local y el aumento de los riesgos por el deterioro del perfil crediticio de Pemex, precisó.

"La perspectiva de crecimiento suave, un entorno de baja inflación (excepto en Venezuela y Argentina), combinado con expectativas de inflación ancladas y un panorama de política monetaria expansiva a nivel global ha abierto espacio para un alivio monetario", dijo Fitch.

"Los bancos centrales en Brasil, Chile, México y Perú ya han recortado las tasas. Sin embargo, los amplios déficit fiscales y desafiantes dinámicas de deuda seguirán pesando en la flexibilidad fiscal, limitando la capacidad de varios gobiernos en la región para estimular la demanda interna", agregó el informe.