La Justicia de Estados Unidos ha dado un paso significativo al ordenar a la Administración del presidente Donald Trump restituir los 500 millones de dólares en fondos federales que habían sido congelados para la Universidad de California, ubicada en Los Ángeles. Esta decisión, tomada por la jueza de distrito Rita F. Lin, subraya que la suspensión de estos fondos fue realizada "de forma injustificada" y mediante "documentos que no cumplen los requisitos legales". La jueza acusó a Trump de cometer un "pecado" al cortar estas ayudas sin motivos de peso.

El conflicto se intensificó a principios de septiembre, cuando más de 100.000 trabajadores de la UCLA presentaron una demanda contra la Administración Trump. La universidad enfrentaba una multa de 1.200 millones de dólares, acompañada de un recorte en las subvenciones para investigación, lo que ponía en riesgo numerosos empleos. La medida inicial se justificó por supuestos actos de "antisemitismo" en el campus, pero el rector Julio Frenk aseguró que la universidad estaba preparada con "planes de contingencia" para enfrentar esta situación económica adversa.

La restitución de los fondos se llevará a cabo a medida que avanzan los procesos judiciales, según informó el diario 'Los Angeles Times'. Esta decisión judicial no solo representa un alivio financiero para la universidad, sino que también destaca la importancia de cumplir con los requisitos legales al tomar decisiones que afectan a instituciones educativas de renombre. La Universidad de California, una de las instituciones públicas más reconocidas del país, podrá continuar con sus proyectos de investigación y mantener los empleos que estaban en peligro debido a la suspensión de los fondos.