En busca de reducir el consumo de tabaco en las próximas generaciones, Nueva Zelanda aprobó una ley que prohíbe que los menores de 14 años puedan comprar cigarrillos. Con esta legislación, la primera de este tipo a nivel mundial, apunta a "crear una generación libre de humo".

“Miles de personas vivirán vidas más largas y saludables y el sistema de salud se ahorrará 5 mil millones de dólares neozelandeses (3.200 millones de dólares estadounidenses) al no tener que tratar las enfermedades causadas por fumar, como numerosos tipos de cáncer, infartos, accidentes cerebrovasculares, amputaciones”, celebró la ministra adjunta de salud, Ayesha Verrall.

La ley prohíbe que cualquier persona nacida a partir del 1 de enero de 2009 compre cigarrillos. De hacerlo, tendrá que pagar una multa de hasta 150.000 dólares neozelandeses (141.744 dólares). Sin embargo, la ley establece que prohibición permanecerá vigente durante toda la vida de una persona, es decir, que los que ahora son menores de 14 años no podrán comprar tabaco cuando cumplan 15, sino que ya lo tienen prohibido para siempre. Para 2050, por ejemplo, las personas de 40 años serán demasiado jóvenes para comprar cigarrillos.

La iniciativa irá acompañada de una serie de otras medidas para hacer que fumar sea menos asequible y accesible, incluida la reducción drástica de la cantidad legal de nicotina en los productos de tabaco y la obligación de a venderlos solo a través de tiendas de tabaco especializadas, en lugar de tiendas de barrio y supermercados.

En esta línea, Nueva Zelanda también aumentó la financiación de servicios y campañas de salud, y puso en marcha servicios para dejar de fumar, específicamente para las comunidades maorí y del Pacífico.

Tabaco y cigarrillos en Nueva Zelanda

The Guardian informó que el número de tiendas legalmente autorizadas a vender cigarrillos se reducirá a una décima parte de los niveles existentes: de 6000 a solo 600 en todo el país. Las leyes aprobaron su lectura final el martes por la noche y entrarán en vigor en 2023, mientras Nueva Zelanda intenta alcanzar su objetivo de hacer que el país sea "libre de humo" para 2025.

Al presentar la ley para su primera lectura en julio, Verrall dijo: "Durante décadas, permitimos que las empresas tabacaleras mantengan su participación en el mercado al hacer que su producto mortal sea cada vez más adictivo. Es repugnante y es extraño. Tenemos más regulaciones en este país sobre la seguridad de la venta de un sándwich que sobre un cigarrillo".

 

“Queremos asegurarnos de que los jóvenes nunca comiencen a fumar, por lo que tipificaremos como delito vender o suministrar productos de tabaco para fumar a nuevas cohortes de jóvenes. Las personas que tengan 14 años cuando la ley entre en vigor nunca podrán comprar tabaco legalmente”, agregó.

“Las tasas de tabaquismo están cayendo en picado. Nuestra meta de estar libres de humo para 2025 está a nuestro alcance”, concluyó.

Los críticos del proyecto de ley, incluido el partido ACT, que tiene 10 escaños en el parlamento, advirtieron que la política podría impulsar un mercado negro de productos de tabaco y acabar con las pequeñas tiendas.

"Nadie quiere ver a la gente fumar, pero la realidad es que algunos lo harán y la prohibición del estado niñera de los laboristas va a causar problemas", dijo la líder adjunta de ACT, Brooke van Velden.

El vape seguirá usándose

Pese a estas iniciativas, las nuevas leyes no restringirán las ventas de vape. Los datos indican que al menos algunos neozelandeses cambiaron su hábito de nicotina de cigarrillos a vapores.

Los datos publicados en noviembre mostraron que la cantidad de personas que fuman a diario había caído al 8%, frente al 9,4% del año pasado, lo que marca las tasas más bajas desde que comenzaron los registros. Se espera que el Proyecto de Ley de Ambientes Libres de Humo reduzca ese número a menos del 5% para 2025, con el objetivo final de eliminar la práctica por completo.

Sin embargo, el aumento de los usuarios diarios de vape fue mayor que la caída de los fumadores diarios: el 8,3% de los adultos ahora vapean a diario, frente al 6,2% del año pasado.

Nueva Zelanda, que ya cuenta con una de las tasas más bajas de fumadores adultos entre los 38 países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, está endureciendo aún más las leyes contra el tabaquismo como parte de un impulso del gobierno para hacer que el país sea "libre de humo" para 2025.

Solo Bután, que prohibió la venta de cigarrillos en 2010, tendrá leyes antitabaco más estrictas.