El presidente de la Reserva Federal (FED) de Estados Unidos, Jerome Powell, descartó la posibilidad de que se produzca una recesión durante 2022 en EEUU, aunque admitió que la inflación puede ser más alta a mediados de este año, luego de que el organismo estatal aumente sus tasas por primera vez desde 2018 ante la escalada de los precios.

Powell sostuvo que "la probabilidad de una recesión dentro del año no es particularmente elevada", en una conferencia de prensa posterior a la reunión del organismo en Washington.

"Podemos ver lecturas de inflación altas a mediados de año antes de que comience a bajar. Esto se debe en parte a los precios más altos de la gasolina y las cadenas de suministro revueltas, las consecuencias de la invasión rusa de Ucrania", explicó.

"La economía de EEUU no solo es muy fuerte, sino quizás demasiado fuerte", dijo Jerome Powell

En referencia a la decisión de subir las tasas, Powell señaló que "la FED se está moviendo hacia una posición más agresiva, decidida a reducir la inflación tanto como sea posible, pero eso no sucederá de la noche a la mañana".

"La economía de EEUU no solo es muy fuerte, sino quizás demasiado fuerte. El mercado laboral está ajustado a un nivel insalubre y los aumentos salariales deberán disminuir para enfriar la inflación", consideró el funcionario.

Powell puntualizó que "la economía es lo suficientemente fuerte como para soportar los aumentos de tasas y seguir recuperándose. En mi opinión, la probabilidad de una recesión en el próximo año no es particularmente elevada. Todas las señales son que ésta es una economía fuerte, una que podrá florecer, por no decir resistir, pero ciertamente florecerá, frente a una política monetaria menos acomodaticia".

"Estamos atentos a los riesgos de una mayor presión alcista sobre la inflación y las expectativas de inflación", dijo Powell, quien aclaró que "el comité está decidido a tomar las medidas necesarias para restaurar la estabilidad de precios".