El ministro de Hacienda británico, Jeremy Hunt, informó que se rebajaron las proyecciones de crecimiento económico del Reino Unido, ya que se espera que crezca un 0,7% en 2024 y un 1,4% en 2025.

Al presentar en la Cámara de los Comunes su Declaración de Otoño, Hunt refirió proyecciones de la Oficina de Responsabilidad Presupuestaria (OBR, por sus siglas en inglés), que previamente había pronosticado un crecimiento del 1,8% para 2024 y del 2,5% para 2025.

El deterioro de las perspectivas es la razón por la que Hunt centró su discurso en el crecimiento. Es un momento crucial tanto para Hunt como para el primer ministro, Rishi Sunak, que intentan reducir la distancia de unos 20 puntos que los separa en las encuestas del opositor Partido Laborista, de cara a las elecciones generales del próximo año.

“Nuestra opción no es un Gobierno grande, un gasto elevado y altos impuestos, porque sabemos que eso conduce a menos crecimiento, no a más”, dijo Hunt. “En lugar de eso, redujimos la deuda, recortamos los impuestos y recompensamos el trabajo”, remarcó el funcionario.

Entre otras medidas, se espera que Hunt amplíe una desgravación fiscal del 100% sobre el gasto de capital para estimular la inversión y anuncie reformas del lado de la oferta, como acelerar las conexiones a la red eléctrica y alentar a más personas a regresar al mercado laboral que abandonaron durante la pandemia. 

En cuanto a las decisiones de gasto, Hunt dijo que se aumentarán los pagos de asistencia social de acuerdo con la cifra de inflación de septiembre, en lugar de la lectura más baja de octubre, una perspectiva que había despertado preocupación entre algunos parlamentarios, preocupados por el impacto en los votantes durante una crisis del costo de vida. También mantuvo el triple bloqueo de las pensiones y decidió no utilizar una cifra salarial más baja para el último aumento.

En cuanto a la deuda, Hunt dijo que cumpliría su regla fiscal de reducir la deuda como porcentaje del PIB al final de los cinco años previstos, con el doble de margen de maniobra que tenía en el presupuesto de marzo, cuando era de 6.500 millones de libras.

Sin embargo, la Resolution Foundation calificó el margen de maniobra de “ilusión fiscal” basada en compromisos adquiridos para los años posteriores a las elecciones que probablemente resulten políticamente imposibles de cumplir.