Se agrava en julio la recesión empresarial de la eurozona
Al descenso de la producción industrial se sumó el del sector servicios, afectados por el impacto de las subas de tasas del BCE en los ingresos de los consumidores
La desaceleración de la actividad empresarial en la zona euro se acentuó en julio, con un importante descenso en el sector servicios y una caída de la producción fabril al ritmo más rápido desde el inicio de la pandemia.
Así lo mostraron los datos del Índice Compuesto de Gestores de Compras (PMI) de HCOB para el bloque, elaborado por S&P Global y considerado un buen indicador de la salud económica general, que cayó a un mínimo de ocho meses de 48,9 puntos en julio, frente a los 49,9 de junio.
La cifra se situó por debajo de la marca de 50 que separa el crecimiento de la contracción, y fue inferior a expectativas de sondeos privados, que había pronosticado un ligero descenso hasta 49,7.
"El sector manufacturero sigue siendo el talón de Aquiles de la eurozona. Los fabricantes han reducido su producción de nuevo a un ritmo acelerado en julio, mientras que la actividad del sector servicios continúa expandiéndose, pero a una velocidad mucho más lenta que en meses anteriores", dijo Cyrus de la Rubia, del Hamburg Commercial Bank.
Complicaciones
"La economía de la zona euro probablemente seguirá su trayectoria a la baja en territorio de contracción en los próximos meses, a medida que el sector servicios continúa perdiendo impulso", agregó.
El PMI de servicios cayó a 51,1 desde 52,0, su nivel más bajo desde enero y por debajo de la previsión de 51,5.
Los consumidores endeudados, afectados por el aumento de los costos de los préstamos y los precios, redujeron el gasto, y el índice de nuevo negocio de servicios se situó por debajo del punto de equilibrio por primera vez en siete meses. Se situó en 48,5 este mes y en 51,0 en junio.
El PMI del sector manufacturero cayó de 43,4 a 42,7 puntos. Encuestas privadas habían pronosticado una ligera suba hasta los 43,5.
Tasas
El índice que mide la producción, que alimenta el PMI compuesto, cayó a 42,9 desde 44,2, un mínimo que no se alcanzaba desde hace más de tres años.
El descenso se produjo a pesar de que los fabricantes redujeron la cartera de pedidos pendientes y recortaron sus precios. Las fábricas se beneficiaron de un fuerte descenso de los costos de los insumos debido a la caída de la demanda de materiales y a la mejora de la oferta. El subíndice cayó a 35,5 desde 39,5, su nivel más bajo en 14 años.
La disminución de la presión sobre los precios será probablemente bien recibida por los dirigentes monetarios del Banco Central Europeo, que no han conseguido que la inflación vuelva a su objetivo del 2% a pesar de aplicar el programa de endurecimiento más agresivo de la historia del Banco.
El consenso de analistas del mercado indica que el BCE subirá el jueves los tipos de interés 25 puntos básicos, mientras una ligera mayoría de esos analistas prevé otra subida en septiembre.