Crece la demanda de los servicios técnicos por la caída de las ventas de electrodomésticos

Reparar un equipo sale hasta un 40% de lo que cuesta comprar uno nuevo

mpilarayuso

En épocas de crisis lo más común es ajustarse en aquellos gastos que sean menos necesarios o se puedan aplazar. El rubro de electrodomésticos está sufriendo esa dura realidad. Según datos del Indec, las ventas del tercer trimestre del año cayeron 22% con respecto al mismo período de 2017.

Esta baja vino de la mano con un aumento en el arreglo de los electrodomésticos. "Ahora los clientes están trayendo modelos más viejos a reparar", asegura a BAE Negocios Sebastián Barbeira, dueño de CES Electrónica. "El año pasado, el 60% de los trabajos eran por garantías y sólo el 40% eran por cuenta de los consumidores, este año la cifra se invirtió y hay más demanda de reparación con cargo", manifestó. "Antes, los services no reparaban una plancha, porque salía más caro el arreglo que el producto en sí", explicó Luis Cafferata, director comercial de la empresa argentina de electrodomésticos Liliana.

Por su parte, Jorge Huck, CEO de Home Solution indicó que el fenómeno ocurre con mayor frecuencia "dentro de los considerados grandes electrodomésticos, donde la reposición se vuelve más costosa y la financiación más necesaria. Aires acondicionados, heladeras, freezers, lavarropas o lavavajillas, son algunos ejemplos".

"Empezamos a ver como llegan modelos más viejos para arreglar", analizó Barbeira, que aclaró que aunque los repuestos sean en su mayoría en dólares, hoy el arreglo no llega a la mitad del precio de un producto nuevo. "Cada dos o tres años la gente sale a reparar mucho, es parte de un ciclo que vemos hace veinte años", describió el dueño de CES Electrónica.

En línea con el contexto, Daniel Rosenfeld, director de BGH Consumer y Latam, afirma que "la falta de cuotas cambian el panorama. No es lo mismo que se rompa un aire y tener que comprarlo por $17.000 en un sólo pago. Puede que la falta de financiamiento haya impulsado el arreglo y empujado hacia abajo el consumo", sostuvo.

"La tasa ronda el 65 por ciento. El que hoy decide adquirir en 12 cuotas paga el doble de lo que vale el producto", reconoció Alejandro Toscano, senior manager de comunicación y asuntos públicos de Whirlpool.

El mercado muestra claros signos de retracción. "El año arrancó pintando mucho mejor", admitió Rosenfeld. Toscano coincide con esto: "Teníamos proyecciones de crecimiento del 11% para el 2018, y cuando lo comparas con el número de hoy es triste". En lo que va del año el sector suma ventas por $74.400 millones.

Dos devaluaciones fuertes y una inflación acumulada en los primeros diez meses del año del 39,5% impactaron en el sector. "Con la devaluación se generó mucho consumo especulativo, en mayo subió el consumo pero no lo suficiente para que tengamos rentabilidad", explicó el directivo de BGH Consumer.

"A partir del primer movimiento del dólar se redujo mucho la rentabilidad, ya que no toda la devaluación la podés aplicar a los precios", sumó Cafferatta.

Todos los directivos consultados coinciden en que la segunda mitad del año hubo caídas importantes, sobretodo después de la segunda devaluación de agosto. Con respecto a este hecho, Toscano resalta un fenómeno particular que sucedió cuando el dólar se disparó a casi 40 pesos. "Con el salto de la divisa, los precios quedaron atrasados y en los últimos dos días del mes se vendió mucho. La gente eligió resguardarse frente al salto cambiario", aseguró.

A pesar que las ventas cayeron fuertemente este año, la demanda de productos mantuvo el mismo mix. "Se achicó la torta, pero cada segmento mantiene una misma proporción", afirmó Rosenfeld. "El que tiene mucho poder adquisitivo para comprar una heladera de $80.000, la crisis le pega mucho menos que a la clase media", explicó.

Toscano destacó el modus operandi del consumidor ABC1. "Los productos premium se venden por las promociones, los clientes esperan comprar a precios más bajos y no tienen apuro", comentó.

Visión optimista

Aunque el 2018 todavía no terminó, los fabricantes ya tienen en la mira 2019. "Pensamos que va a ser un año mejor, aunque no sabemos en qué medida", sostuvo el ejecutivo de Whirlpool. No obstante, hizo hincapié en que si "este año es muy malo, al 2019 le va a costar llegar al nivel del 2017".

"El año, que prácticamente está terminado, no visualiza ninguna mejora", confirmó el directivo de Liliana. El hombre fue un poco más lejos y le puso fecha al final de la crisis del sector, "muy lentamente se va a acomodar el mercado, y a partir de marzo empezaría a mejorar la situación".

Rosenfeld coincidió con esta fecha: "A partir de marzo el consumo va a empezar a acomodarse y la economía también. Creemos que el segundo semestre del 2019 va a ser muy bueno, va a haber un acomodamiento de la economía, que hoy está muy golpeada", concluyó.

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