Dark Stores: los supermercados también libran su batalla en ese nuevo segmento de negocios
Varias cadenas buscan readaptar sus grandes superficies a la nueva realidad que escapa a las aglomeraciones de público y despliegan centros logísticos para dar un mejor servicio a los que compran desde su casa
El año pasado, en pleno aislamiento producto de la pandemia, nació un nuevo formato comercial: los dark stores o tiendas fantasma. Son espacios ubicados en zonas de mucha demanda que sirven para abastecer a aquellos consumidores que compran a través del comercio electrónico, una herramienta que se quintuplicó el último año. Esos lugares se stockean a diario y, según el tipo de consumo de esa zona, planifican que productos son necesarios para satisfacer la demanda.
En ese contexto, los supermercados están librando una nueva batalla por esos clientes que ahora prefieren comprar desde su computadora o su smartphone, para aprovechar incentivos como, por caso, propone Club Crónica con PedidosYa, una empresa que participa del eslabón logístico.
Además, buscan adaptar sus grandes superficies a la nueva realidad que escapa a las aglomeraciones de público. Por esa razón, muchas cadenas analizan reconvertir sus actuales puntos de venta para llevarlos a un modelo mixto que combine, en forma independiente, atención al público y dark store.
Uno de los que se está subiendo al ring es el Grupo Libertad, cadena originaria de Córdoba que es controlada por la francesa Casino. La empresa acaba de inaugurar su primer dark store en la ciudad de Mendoza.
La puesta en marcha de Libertad Tienda Digital apunta a ampliar el radio de llegada de los locales físicos de la compañía y a desembarcar en nuevas plazas. "El modelo se monta sobre el concepto de tiendas ciegas sin atención al público y que dan soporte a la venta digital. Funcionan como depósitos y sitios de entrega de productos", afirmó Diego Martín Sabat, Director de Legales y Relaciones Institucionales de Grupo Libertad.
Los clientes pueden hacer sus pedidos a través de la web o de plataformas como Rappi y PedidosYa y realizar el pickup en el lugar.
Uno de los primeros que se subió al formato fue la cadena Dia. Desde el año pasado, tiene un espacio exclusivo para la venta online en la ciudad de Buenos Aires, que no comparte el stock con la tienda física y también cuenta con otro dark store ubicado cerca de Pilar, que abastece a buena parte de la zona Norte del Gran Buenos Aires.
A nivel local, Coto también planea reconvertir algunas sucursales para llevarlas a ese formato y en Chile, la estadounidense Walmart invertirá 50 millones de dólares para crear varios dark stores.
Alimentos y bebidas
Las marcas también están apostando fuerte al modelo de negocios. Simpleat, el ecommerce de comidas congeladas saludables, abrió un centro de distribución en Belgrano. El lugar, de más de 1.000 metros cuadrados, permitirá concretar en menos de 24 horas las entregas a domicilio que antes se realizaban en hasta dos días hábiles. Con esta flamante infraestructura, desarrollada con una inversión inicial de 125.000 dólares ven equipamientos y tecnología, la empresa apunta a cuadruplicar su volumen de ventas. La planta funcionará como centro de armado de pedidos y también será punto de retiro, sumándose a los otros diez que ya tiene en la ciudad de Buenos Aires.
Otro caso es el de Tomate Algo, una empresa que hace quince años ofrece barras móviles para eventos, actividad que hoy está restringida.
Su creador, Sebastián Policaro, le explicó a BAE Negocios que "cuando empezó la pandemia, decidimos vincularnos con cafeterías, heladerías y restaurantes que hacían delivery. A través de ellos y de las aplicaciones, podemos llegar con nuestras bebidas a los clientes". En este caso, Tomate Algo decidió utilizar lugares que ya estaban funcionando. El emprendedor espera llegar a los cien puntos de venta en la Ciudad y el Gran Buenos Aires.