Desde la provincia de Córdoba, la empresa Indusplast, fabricante y comercializadora de piscinas de fibra de vidrio, apuesta al crecimiento. Anunció que invertirá 200 millones para ampliar su planta productiva de Malagueño y consolidar el liderazgo en la categoría: tienen la planta de piscinas más importante de Sudamérica. 

Con 39 años de historia, Indusplast es una empresa familiar. Fue creada por Eduardo Piccini y hoy es continuada por su esposa e hijos. Cuenta con dos plantas de producción con una capacidad productiva de casi 10.000 piscinas por año y tienen 165 empleados. Se especializan en cinco líneas de piscinas para exterior, para interior y spa, entre otras. Ofrecen más de 30 modelos. Tienen una experiencia de 40.000 piscinas instaladas con 15 años de garantía estructural. Además, poseen 50 puntos de venta distribuidos en 19 provincias del país y poseen una flota propia de 20 vehículos para distribución. Exportan a Chile y Uruguay.

Tiene una planta de producción en Carlos Paz con una capacidad de producción de 2.500 anuales y otra planta en Malagueño con una capacidad de 7.000 piletas anuales, que es la que ampliarán. "Con esta inversión de $200 millones sumaremos la producción de casi 2.000 piscinas y aumentaremos la integración productiva con más accesorios nacionales, reemplazando los que se importan de China. Por convicción personal y formación, creemos que la diferencia la tenemos que hacer con la industria argentina. El mejor aporte es generar valor agregado y exportarlo, para devolver a la argentina y posicionarla en el mundo", señaló su CEO, Mauro Piccini a BAE Negocios.

Buscan ampliar los mercados donde exportan. Las piletas cordobesas llegarán en breve a Europa, contó Piccini: "El mes que viene sacamos el primer embarque a Inglaterra, iba a salir en diciembre pasado y fue postergado por la pandemia. La materia prima es complicada para conseguir a nivel mundial y hay desabastecimiento. Nosotros estamos bien con parados y con stock". 

Indusplast, fábrica de piscinas de fibra de vidrio

Sobre la demanda del mercado local, cuentan que la pandemia convirtió en un éxito la venta de piletas. Se batieron récords históricos. "El año pasado fue un boom de ventas de piscinas, los números de venta de piletas fueron irreales. Vendimos un 70% más que en un año muy bueno. Este año las ventas no vienen ni siquiera parecidas a un año normal. Después de las elecciones se frenó la venta. Hay miedo, la gente ya no está permeable a hacer una inversión. Nosotros apuntamos a la clase media y media alta, pero notamos una baja importante en las ventas", señaló a BAE Negocios, el hijo de Eduardo Piccini.

Indusplast igual apuesta al futuro, y amplía su planta. Otro negocio familiar es el astillero Piccini Boat que se dedica a hacer lanchas deportivas. Un sector complic