Temu gana terreno en Argentina con precios desde China
Aunque hace apenas un par de años el nombre de Temu no figuraba en las conversaciones sobre compras online en Argentina, hoy la plataforma china pisa fuerte.
Lo que comenzó como una alternativa económica para adquirir productos directamente desde Asia, se ha convertido en una opción real para miles de usuarios que buscan ahorrar sin renunciar a variedad.
El contexto no es menor. Con una inflación que empuja constantemente los precios en tiendas físicas y virtuales locales, muchos consumidores han optado por explorar opciones internacionales. En ese escenario, Temu ha sabido posicionarse con una propuesta clara: precios accesibles, envíos gratuitos (en muchos casos) y una navegación sencilla desde el celular. A esto se suma una estrategia agresiva de cupones que recuerda a los comienzos de plataformas más conocidas. De hecho, si te interesa ese tipo de promociones, también podés aprovechar los descuentos Temu disponibles en sitios especializados.
Compras desde China crecen entre usuarios argentinosEn los últimos doce meses, los pedidos desde apps chinas aumentaron más del 45 % en Argentina, según datos de Statista. Este crecimiento no sorprende: la diferencia de precios puede ser abismal en algunos rubros, especialmente en productos de tecnología pequeña, decoración o ropa informal. Frente a esto, muchos argentinos se animan a esperar unas semanas más con tal de pagar mucho menos.
Además, las nuevas generaciones ya no sienten temor al comprar fuera del país. La experiencia se vuelve cada vez más intuitiva y confiable: las traducciones automáticas, las pasarelas de pago seguras y las reseñas de otros usuarios generan confianza incluso entre quienes no solían usar e-commerce. No se trata solo de precio, sino de una experiencia completa que responde a una nueva lógica de consumo.
Los artículos más populares son bastante predecibles si se piensa en el tipo de usuario que más interactúa con la plataforma. Gadgets para el celular, organizadores de cocina, auriculares inalámbricos, luces LED, herramientas pequeñas o accesorios para mascotas figuran entre los favoritos. Todo lo que puede comprarse por menos de 5 dólares y no paga impuestos es terreno fértil.
El público más activo se ubica entre los 18 y los 35 años. Se trata de personas que manejan con soltura el entorno digital y están familiarizadas con plataformas como AliExpress o Shein. Para muchos, Temu representa la evolución de esas experiencias, con tiempos de entrega algo más cortos y una interfaz más parecida a TikTok que a un sitio de compras tradicional.
Descuentos y cupones como motor de crecimiento de TemuTemu no solo compite en precios, sino en el juego psicológico de la recompensa. Desde el momento en que abrís la app, te ofrecen algún tipo de cupón. A veces es por invitar amigos, otras por completar una ruleta diaria. Y aunque los montos sean pequeños, el efecto acumulativo es potente: te sentís premiado simplemente por navegar.
Este modelo, que ya vimos en otras apps asiáticas, funciona bien en países como Argentina donde cada peso cuenta. En un entorno económico inestable, las promociones actúan como un empujón emocional que justifica la compra. Además, ese sistema de “premios por uso” genera fidelidad casi sin que lo notes. Si en unas semanas también suman campañas locales, la expansión será aún más marcada.
Cómo influye Temu en los hábitos de compra localesLo que antes era un hábito de pocos importar productos por cuenta propia ahora es una práctica común. Temu y otras plataformas han democratizado el acceso al consumo global. La consecuencia directa es que hoy comparás más. Ya no comprás sin chequear si el mismo producto cuesta la mitad afuera, aunque tardes más en recibirlo.
Claro que esto también trae tensiones. Algunos comercios locales ya expresaron su preocupación por la competencia desleal: productos que entran sin aranceles, con precios inalcanzables para vendedores argentinos. Pero también hay quienes ven una oportunidad: adaptar su oferta, mejorar el servicio o incluso incorporar algunos de esos productos mediante dropshipping o modelos híbridos.
El fenómeno Temu no es menor. Su crecimiento en el país refleja algo más profundo: un cambio cultural en la forma en que consumimos. Comprar desde China ya no es extraño, ni marginal. Es, en muchos casos, una estrategia cotidiana. Y en un futuro no tan lejano, podríamos ver a plataformas como esta integradas en ecosistemas locales, con alianzas, acuerdos logísticos o presencia en eventos como el Hot Sale.
No es casualidad que cada vez más usuarios estén atentos a lo que aparece en su feed de Temu como si fuera una red social. Porque, de algún modo, lo es. Comprar dejó de ser un acto puramente racional: ahora también es parte del entretenimiento digital.