Con un mensaje apuntado a generar cambios en el desarrollo industrial, el presidente Alberto Fernández anunció la promulgación de la Ley 27.621 que implementa la Educación Ambiental Integral (EAI) en todo el país. En este sentido, insistió en la urgencia de modificar conductas en la producción: "No se puede seguir viviendo con la lógica del presente".

La iniciativa permite implementar una política pública de educación ambiental e incorporar los nuevos paradigmas de la sostenibilidad a los ámbitos de la educación formal y no formal, el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible y el Ministerio de Educación. Su principal instrumento es la Estrategia Nacional de Educación Ambiental (ENEA).

La ley busca "poner en cabeza del Estado, de los que educan y todos los actores involucrados la obligación de educar a nuestros chicos desde muy chiquitos", para que entiendan "que cada árbol que se cuida es más oxígeno que respiramos; que el agua que no se contamina es mejor agua que tomamos; que el agua que no se derrocha sirve para regar plantar necesarias para nuestra alimentación; que aquello que cultivamos sin agregar agrotóxicos hace a la mejor salud nuestra", ejemplificó Fernández.

"Es mejor vivir en un mundo donde comer, respirar o tomar agua no se convierte en un riesgo. Eso venimos a hacerlo con educación, no para el futuro, sino para el presente", sostuvo el mandatario, quien encabezó el acto para anunciar la promulgación de la ley en la Residencia de Olivos junto a activistas ambientales, así como la directora del Instituto Nacional de Juventudes, Macarena Sánchez, y los ministros de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Juan Cabandié, y de Educación, Nicolás Trotta.

Fernández remarcó que en su época de juventud "se dejó al medio ambiente en un segundo plano, en procura de un desarrollo industrial que hacía menos vivible al planeta".

"Queremos alcanzar un futuro mejor y nos ponemos objetivos de acá a 10 años, pero el problema ambiental es del presente, no es un problema del futuro. Aunque vengo de otro siglo, me doy cuenta de que hay que hacerlo ya. Esto también supone un cambio de cultura, entender el desarrollo industrial de otro modo", subrayó.

En ese sentido, planteó que "el desarrollo exige un crecimiento igualitario, pero fundamentalmente un crecimiento que no contamine, que no haga menos vivible el país, exige que podamos vivir más cómodamente preservando el ambiente en que vivimos".

"No se puede seguir viviendo con la lógica del presente. Todo acto de desatención al ambiente es un poco más de daño que nos infligimos a nosotros", recalcó el Presidente.

Con respecto a la ley, destacó que surgió por "la importancia de empezar a educar a las nuevas generaciones sobre la importancia del ambiente", algo que a las personas de su edad "no les enseñaron". "Sí nos enseñaban cómo puede aumentar la productividad, pero no existía el derecho ambiental", recordó.

Sobre esto, lamentó que "hizo falta que la contaminación nos enferme para que nos demos cuenta de la importancia de mantener nuestra casa común en condiciones vivibles".

"Cuidar el medioambiente es cultivar sanamente aquello que comemos, cuidar el agua, cuidar cómo se vive en la urbanidad: cómo hacemos que el hacinamiento humano de las grandes ciudades respete condiciones mínima de salubridad en la convivencia. Es imperioso que lo asumamos como una necesidad social", resaltó.