Entre zigzagueos y en el último trecho de la campaña electoral hasta las PASO, su principal oponente logró instalar el debate en el terreno económico. Las recientes declaraciones del candidato a presidente del Frente de Todos, Alberto Fernández, sobre el pago de intereses de Leliqs, sumado a la suba del dólar, empujaron al oficialismo a correrse de su agenda y hablar de economía, algo que prefieren eludir los estrategas comunicacionales de la alianza gobernante.

"Vamos a dejar de pagar los intereses de Leliq que está pagando Argentina todos los días". Esas fueron las palabras que el domingo pasado causaron revuelo en las filas oficialistas, aún cuando, en las primeras horas del lunes, en el Gobierno nacional eligieron el silencio. El único que cuestionó la propuesta del ex jefe de Gabinete fue el postulante a senador nacional por Juntos por el Cambio, Martín Lousteau.

Sólo temen una corrida tras las primarias si Fernández gana por amplio margen

Recién ayer, luego de que la moneda estadounidense trepó a 45 pesos, desde la administración central, a través del secretario general de la Presidencia, Fernando De Andreis, se refirieron al tema. "No está previsto de ninguna manera un sobresalto con el dólar", apuntó el funcionario al término de la reunión de Gabinete en la Casa Rosada. Y aclaró que "habrá un pequeño movimiento diario como el de ayer" (lunes) en el dólar, así como "el viernes fue para abajo", pero que esas variaciones "no están vinculados a ninguna declaración de nadie".

Por estas horas, lo que más lamentan en el equipo de campaña de Juntos por el Cambio es que su contrincante los llevó a pronunciarse sobre la situación de la economía, una de las grandes deudas de la gestión del presidente Mauricio Macri. Creen que los dichos del dirigente peronista tienen como objetivo sembrar incertidumbre a dos semanas de las elecciones, además de buscar contrastar con el modelo económico del actual gobierno.

La orden interna sigue siendo que eviten enredarse en discusiones económicas

Sin embargo, fuentes gubernamentales señalaron a BAE Negocios que confían en que "antes de las PASO no habrá ninguna corrida cambiaria" y que sólo "puede moverse un poco el dólar, pero nada preocupante". El panorama para después de las primarias dependerá del resultado, según analizan en el Poder Ejecutivo nacional y el de la provincia de Buenos Aires. El planteo es que si Fernández lograra imponerse por un amplio margen el 11 de agosto próximo, podría haber una escalada del dólar antes de los comicios generales.

A excepción de una pequeña intervención del ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, que la semana pasada cruzó al candidato a presidente del Frente de Todos por las cifras del déficit fiscal en 2015, la orden es que tanto los funcionarios como los candidatos de Juntos por el Cambio eviten enredarse en discusiones económicas, algo que a estas alturas parece difícil.