La querella de la vicepresidenta Cristina Kirchner reclamó ante la Justicia la realización de un conjunto de medidas de prueba antes de que el caso que investiga el intento de magnicidio producido el 1° de septiembre se eleve a juicio público y oral.

Los abogados de la exjefa de Estado Marcos Aldazabal y José Manuel Ubeira presentaron un escrito ante la jueza María Eugenia Capuchetti y el fiscal Carlos Rívolo en el que alegaron: "Por el momento, venimos a insistir con la producción de una serie de medidas de prueba todavía pendientes y a proponer algunas nuevas".

Hasta ahora, los únicos detenidos por el intento de magnicidio son, por un lado, el autor material Fernando Sabag Montiel, su pareja Brenda Uliarte como coautora y uno de los líderes de Revolución Federal y dueño del carrito de copos de nieve, Gabriel Carrizo.

 

La "pista Milman" en el ojo de la tormenta

Dentro de las medidas de prueba que reclaman Aldazabal y Ubeira, se encuentra el pedido de convocar nuevamente a Jorge Abello, el asesor de un diputado oficialista que declaró ante la Justicia por presuntamente haber escuchado al diputado de Juntos por el Cambio Gerardo Milman referirse al intento de atentado contra la vicepresidenta un día antes de que este finalmente sucediera. 

Según se pudo saber en aquel entonces, Abello escuchó como Milman le decía a sus dos asesoras, Carolina Gómez Mónaco e Ivana Bohdziewicz, "cuando la maten voy a estar camino a la costa" en un bar en las proximidades del Congreso. Ambas mujeres también están siendo investigadas en la causa.

Los abogados de la vicepresidenta remarcaron que la primera declaración de Milman se produjo solo ante la jueza Capuchetti sin que la querella hubiera podido interrogarlo. Situación que alimentó el pedido de recusación contra la magistrada por la falta de imparcialidad en el caso. 

Las otras pruebas que reclama la querella de Cristina Kirchner

La querella también reclamó la investigación sobre el papel encontrado en la casa de Brenda Uliarte, que tenía escrito "Regla Tuller", lo cual llamó poderosamente la atención, puesto que se le denomina así a la técnica que mide el tiempo y la distancia necesaria para disparar sin ser alcanzado por otras personas. Esta regla fue traída al país por Gerardo Milman cuando este era secretario de Gestión Federal de Seguridad durante el gobierno del expresidente Mauricio Macri.

Además, insistieron con la realización de una pericia caligráfica sobre la hoja hallada en la casa de Uliarte, a partir de la comparación con los cuerpos de escritura de Uliarte, Sabag Montiel y Carrizo y así determinar de quién es la letra.

Aldazabal y Ubeira también solicitaron medidas de prueba tendientes a determinar una posible relación de la agrupación "Revolución Federal", conocida por protagonizar manifestaciones violentas en las calles de la Ciudad de Buenos Aires.

Sobre todo en el celular de uno de los referentes de Revolución Federal, Jonathan Morel, quien además es investigado por los presuntos nexos comerciales entre la carpintería del militante libertario y la firma Caputo Hermanos, al cual pertenece al expresidente del Banco Nación Luis "Toto" Caputo.