La multinacional fabricante de neumáticos Bridgestone oficializó ante la secretaría de Trabajo su solicitud para definir un Procedimiento Preventivo de Crisis (PPC) y el mismo contempla la alternativa de efectivizar 450 despidos en esa firma. Sumándose de esta forma a la compañía nacional Fate, los hechos determinan que dos de los tres fabricantes de cubiertas para vehículos y camiones del país planteen la posibilidad de efectivizar cesantías y suspensiones como lo establece el PPC.

Bridgestone apunta en sus fundamentos a la "conflictividad gremial" y hace blanco en el Sindicato Único de Trabajadores del Neumático (Sutna), quienes a su vez imputan a la empleadora de tener ganancias millonarias por la venta de sus productos.

De aprobarse el PPC la multinacional considera que podrá definir una reorganización lo cual le permitiría "funcionar adecuadamente". Vale recordar que, como publicó BAE Negocios, desde el comienzo de la gestión de Javier Milei al corriente hubo trámite oficial para 38.178 expedientes de PPC y 6.120 tuvieron acuerdo entre las partes. La estadística de años anteriores revela que tuvieron desarrollo entre 60.000 y 70.000 trámites por año.

El secretario general del Sutna, Alejandro Crespo, reseñó que Bridgestone le comunicó al personal "el parate de su producción" por una semana, "pero además, se les empezó a enviar telegramas en los que se les dice que se prescindirá de ellos por tiempo indeterminado".

El argumento de la compañía, al decir de esa organización gremial fue "aducir un reordenamiento de stock" con lo cual el Sutna denunció a la empleadora ante el Ministerio de Trabajo de la provincia de Buenos Aires. El marco del PPC estará sujeto en las próximas semanas a la negociación entre las partes, por lo que su resultado final todavía se considera incierto, como también que las suspensiones y despidos pueden no ser las únicas variables que se concreten de progresar esa gestión.

Bridgestone, a diferencia de Fate, argumentó que la determinación de reclamar el PPC no se debe a la coyuntura económica del país, sino que por el hecho de que sus exportaciones se derrumbaron por directa influencia de las tesituras del sindicato.

"A partir del extenso conflicto gremial de 2022, sufrimos una pérdida de confianza corporativa que generó la transferencia del volumen de exportación de la Argentina a otras plantas de la región. Como consecuencia, hoy estamos exportando solo el 10% de lo que proyectábamos", reseñaron.