La titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, calificó este jueves de "vergonzosa" la visita de un puñado de diputados nacionales que integran el bloque de La Libertad Avanza, realizada días atrás a represores detenidos en el penal de Ezeiza,  condenados por crímenes de lesa humanidad.

El último miércoles, los legisladores libertarios Beltrán Benedit, Guillermo Montenegro, Alida Ferreyra, Lourdes Arrieta,  María Fernanda Araujo y Rocio Bonacci, visitaron en el penal de Ezeiza a los represores Alfredo Astiz, Antonio Pernías, Gerardo Arraez, Honorio Martínez Ruiz, Agustín Oyarzabal Navarro, Juan Manuel Cordero, Mario Marcote, Miguel Ángel Britos, Adolfo Donda, Raúl Guglielminetti y Carlos Suárez Masón. 

"Realmente es vergonzoso esto porque de (Alfredo) Astiz sabemos que su historia está muy clara, dé como participó de la represión y muerte de muchísimos argentinos", indicó Carlotto, quien recordó que el ex oficial de la Armada "está preso porque tiene una condena firme".

La dirigente de derechos humanos, dijo que "visitarlos pueden porque eso también lo hacen con otros delincuentes sus familiares, pero de ahí a que gente importante del Gobierno que representa a partidos políticos vaya a rendirle homenaje a un personaje de esta calidad, realmente duele y mucho".

Respecto al diputado Benedit, quien habría afirmado que los genocidas presos "son ex combatientes que libraron batallas contra la subversión marxista", Carlotto aseguró que "esos son los términos que tenían los que mataron 30 mil personas, robaron niños y dinero durante la dictadura cívico militar que tuvimos". 

"En la libertad de un pueblo que vive en democracia, el que quiera hablar que hable y sabrá sus consecuencias" pero realmente es abominable que alguien recuerde de esta manera una historia tan triste", indicó la Abuela de Plaza de Mayo. 

Sobre la posibilidad de que desde la Cámara de Diputados los libertarios puedan estar pensando algún proyecto con miras a liberar a los represores presos, Carlotto dijo no creer en esa posibilidad porque si están detenidos es merced "a las pruebas de lo que han hecho"

Sin embargo, consideró que la visita de los diputados demuestra "la calidad de personas que son" y además, "lo que les gustaría que se volviera a lo que sería una dictadura. Son enemigos del país, no son personas respetables" porque "se puede pensar distinto dentro de las normas democráticas, pero no bendecir a quienes mataban sin piedad".

"Creo que tenemos un Gobierno que permite que se hagan todas estas cosas y que es el principal en hacerlo", con lo que lógicamente, dejan "las puertas abiertas para que hagan todo lo que quieran", afirmó Carlotto.

El bloque de diputados nacionales de Unión por la Patria repudió la visita que seis pares de La Libertad Avanza realizaron en el penal de Ezeiza a Alfredo Astiz y a otros represores condenados por delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura militar.

“Repudiamos la reunión mantenida por diputados y diputadas nacionales de La Libertad Avanza con militares y miembros de fuerzas de seguridad condenados por crímenes de lesa humanidad”, publicó en redes sociales el bloque encabezado por Germán Martínez, que también presentó un proyecto de resolución para expresar la más enérgica condena al hecho. 

Y añadió: “Ratificamos nuestro compromiso con el respeto por la democracia. Memoria, Verdad y Justicia”.

El diputado nacional de Unión por la Patria Ricardo Herrera presentó un proyecto de resolución, acompañado por una treintena de firmas del bloque, para expresar repudio por la reunión en el penal de Ezeiza.

“Este encuentro se inscribe en la búsqueda del oficialismo por relativizar los horrores del pasado. Frente a eso, reafirmamos nuestro compromiso por la Memoria, la Verdad y la Justicia, y decimos que el único lugar para quienes planificaron y ejecutaron el terrorismo de Estado es la cárcel común y efectiva”, comentó la vicepresidenta de la Cámara baja, Cecilia Moreau (UP), en la red social X.

También el Comité Nacional de la UCR, presidido por Martín Lousteau, se expresó en la misma línea, al sostener que dicha visita resulta un “hecho inédito” en la historia democrática reciente del país y constituye “una afrenta a las víctimas, sus familiares y a todo el pueblo argentino”.