Corte Suprema y PASO: el kirchnerismo tiene la llave para destrabar dos temas clave para Milei
A cuatro días de la jubilación de Maqueda y con los plazos electorales respirando en la nuca, el Gobierno debe afrontar un mano a mano con los K si quiere evitar designar jueces por decreto y eliminar las PASO antes de las elecciones de 2025
“Tienen que acordar con el kirchnerismo, no hay otra. Por más voluntad que le pongan los aliados, no alcanza", repetía hasta al cansancio una fuente parlamentaria en diálogo con BAE Negocios, tras una reunión con funcionarios. Se trata de una realidad que al Gobierno le cuesta aceptar, al punto de que sus prioridades terminaron aplazándose. Parece un escenario inevitable y la posibilidad de que convoquen o no a extraordinarias en 2025 para meter quinta a fondo dependerá de si consiguen llegar a un acuerdo con Unión por la Patria en dos temas clave: los jueces de la Corte Suprema y la eliminación de las PASO.
El Senado es el foco de ambas batallas, puesto que la bancada que conduce José Mayans cuenta con una mayoría más ponderosa que en Diputados. Con la exclusión de Edgardo Kueider, tienen por sumar a una camporista, Stefania Cora, que los dejará a tres opositores del quórum, y en la Cámara alta abundan tanto entre radicales, el PRO y partidos provinciales. Para aprobar los pliegos de Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla necesitan de dos tercios y para avanzar con la reforma electoral deberán conseguir la mayoría absoluta del total de los miembros de ambas Cámaras.
JuecesEn este contexto, al Gobierno no le quedan demasiadas opciones. En el caso de los jueces de la Corte, están en un punto muerto: los libertarios hablan de negociar, pero tampoco están dispuestos a ceder, algo que ya se convirtió en costumbre. Como informó BAE Negocios, a día de hoy el asesor Santiago Caputo todavía no sabe qué hacer: si ir a por todo nombrándolos por decreto, o si seguir apostando a llegar a un acuerdo.
El secretario de Interior, Lisandro Catalán, y el asesor Eduardo Lule Menem la semana pasada se lo reconocieron a dos senadores aliados, Carlos “Camau” Espínola y Juan Carlos Romero: la decisión de designar a los jueces por decreto no está tomada y de llegar a conseguir un consenso con UxP en las próximas semanas, llamarán a extraordinarias para aprobar los pliegos.
Pero no hay posibilidad de llegar a un acuerdo sin el kirchnerismo: en un punto pensaron que negociando con el peronismo no K (los que responden a los gobernadores) podrían llegar a algún puerto, pero se quedan cortos de bancas para los dos tercios.
La cúpula libertaria admite que las conversaciones empezaron mal desde el vamos. “Lo único que ponemos sobre la mesa es que estamos abiertos a una negociación”, dicen en Casa Rosada, a siete meses desde que presentaron los pliegos. Sin embargo, no dan el brazo a torcer y reconocen que bajo ninguna circunstancia están dispuestos a dar lugar a los pedidos de UxP.
La bancada de Mayans plantea proponer a una juez mujer en lugar de García Mansilla y, sino, ampliar la Corte para incorporarla, pero Caputo sigue pisando firme en que primero se aseguren los dos pliegos que propusieron y, solo entonces, están dispuestos a evaluar la posibilidad de incluir a otra magistrada. Frente a este escenario, en Balcarce 50 mantienen encajonado el decreto para designar a los jueces, que ya está escrito hace mes y medio, y no descartan publicarlo en las próximas semanas.
Mientras, la Corte Suprema dejó en claro que no van a seguir esperando que se decidan con el Congreso y emitieron una acordada que inmovilizó la decisión, en la que establecieron un mecanismo más ágil para sustituir a jueces por conjueces si no se acuerda una mayoría, en plan de enviarle el mensaje al Gobierno de que piensan seguir funcionando con solo tres miembros, algo que ocurrirá en cuatro días, cuando se jubile Juan Carlos Maqueda.
Las PASOPor otra parte, la reforma electoral también aguarda en gateras y en los últimos días el Gobierno empezó a apurar en redes sobre la necesidad de eliminar las PASO urgente. La iniciativa fue originalmente presentada en la primera Ley Ómnibus y, tras ser descartada, amagaron con tratarla en julio hasta que finalmente la presentaron a fines de noviembre, en pos de tratarla en extraordinarias este diciembre, pero no consiguieron el consenso para hacerlo: al menos esa es la versión oficial, aunque puertas adentro repiten que cuentan con los votos del peronismo hace meses.
Los libertarios se ilusionan con poder desafiar el cronograma electoral y aprobarlo antes de mayo, cuando los plazos para las elecciones 2025 empiezan a correr. El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, insinuó que podría tratarse en extraordinarias en febrero, y sino serían la prioridad al comienzo del período ordinario, que comienza en marzo. Mientras buscan un consenso con los legisladores, hacen lo que mejor saben hacer: imponerlo en la agenda de la opinión pública.
El proyecto de la reforma electoral será primero tratado en Diputados, en donde también hay otras iniciativas del peronismo para restringir las PASO. El PRO, por su parte, evalúa eliminar su obligatoriedad, aunque la UCR considera que eso sería aún peor. Los sectores aliados de Milei en el Congreso hoy mantienen un vínculo áspero y el Gobierno no teme enfrentarlos, rumbo a los comicios de medio término del próximo año.
No los necesitan, puesto que UxP será su aliado clave en este caso: un sector mayoritario coincide con al menos tratar un proyecto para suspenderlas este año. La iniciativa la llevó Sergio Massa también a la provincia de Buenos Aires, y los peronistas admiten que a Cristina Fernández de Kirchner le gusta la idea de tener la lapicera y el tiempo para ordenar las candidaturas también a nivel nacional.
A los libertarios no les importa tener intereses alineados con el peronismo en este sentido, según confesaron allegados al karinismo de LLA a este medio, porque se excusan en que se trata de una idea consensuada con la ciudadanía: la incomodidad de votar dos veces y el ajuste fiscal que implicaría son motivos suficientes. Sin embargo, la exposición que hubiese tenido impulsar esto de la mano de los K tras la expulsión de Kueider y la caída de Ficha Limpia para algunos hubiese sido inoportuno. Martín Menem no va a poner primera, tampoco, si no tiene el poroteo asegurado, y el peronismo parlamentario mantiene al Gobierno en vilo mientras siguen titubeando.