La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner "continúa con una evolución favorable" de la operación a la que se sometió esta mañana en el Sanatorio Otamendi, en la que le extirparon un pólipo uternio de "características benignas", confirmó la doctora Marisa Lafranconi, directora del Sanatorio Otamendi.

La expresidenta se había sometido a una histerectomía, una operación que consiste en la extracción del útero y el cuello uterino, y en algunas ocasiones también los ovarios, y las trompas de Falopio. La intervención la realizó un cirujano especializado en Tocoginecología, que recibió a Cristina Kirchner a las 6:45 en el Sanatorio.

Según confirmaron las autoridades médicas de la institución, la vicepresidenta está "en buen estado general y con buena recuperación de la anestesia". Además, adelantaron que el resultado definitivo del examen histopatológico, es decir, la evaluación que tiene como objetivo identificar alteraciones estructurales y anormalidades proteicas o genéticas para corroborar el diagnóstico o causa de enfermedad, se realizará la próxima semana. 

Es la tercera intervención a la que se sometió Cristina Kirchner. Las dos anteriores habían sido cuando era presidenta: la primera fue en 2012, cuando se le extirpó la glándula tiroides en el Hospital Universitario Austral, en Pilar; y la segunda en 2013, cuando se operó en la Fundación Favaloro por un hematoma subdural que había sido localizado entre el cerebro y el cráneo.

Cristina fue saludada por el presidente Alberto Fernández, que acompañó una foto de ambos con el hashtag #FuerzaCristina, del que se hicieron eco cientos de seguidores de la vicepresidenta en las redes sociales.