La expresidenta Cristina Fernández recordó hoy que el 15 de diciembre de 2005 el exmandatario Néstor Kirchner anunció la cancelación de la deuda que hasta entonces el país contraía con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Néstor Kirchner, durante su gobierno entre 2003 y 2007, decidió hace 18 años la cancelación "en un solo pago" de una deuda de 9.810 millones de dólares que el país mantenía con el FMI.

 

 

"He tomado las decisiones institucionales que nos permitirán destinar nuestras reservas de libre disponibilidad al pago de la deuda total con el FMI", explicó Kirchner.

"La deuda con el FMI que cancelamos, similar a la suba que ese organismo prestó para sostener un régimen de convertibilidad destinado al fracaso, ha resultado lejos la más condicionante", dijo el exmandatario en aquel anuncio.

Para Kirchner, la cancelación de esa deuda se trató de un "paso transcendental" que permitiría "mirar sin imposiciones, con autonomía y tranquilidad, sin urgencias impuestas ni presiones indebidas, la marcha de nuestro futuro".

"El FMI ha actuado respecto de nuestro país como promotor de políticas que provocaron pobreza y dolor del pueblo argentino, de la mano del Gobierno, quienes eran proclamados alumnos ejemplares del ajuste permanente", agregó sobre el organismo.

Cómo se llevó a cabo el pago al FMI

En un clima de euforia, y frente a 700 personas, Kirchner afirmó que la cancelación de la deuda serviría para "ganar grados de libertad para la decisión nacional" y permitiría al país no estar obligado a atender los reclamos y exigencias del Fondo a la hora de negociar acuerdos de refinanciación de los vencimientos.

En aquel entonces, en un comunicado oficial, el director gerente del Fondo, el español Rodrigo de Rato, manifestó su satisfacción por la medida, y señalaba que la Argentina tenía por delante "importantes desafíos".

"La Argentina abonará anticipadamente al FMI la suma total adeudada de 9810 millones de dólares", dijo el Presidente con énfasis. Desde la Casa Rosada aseguraron que la decisión fue coordinada con Brasil, que con el gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva también había informado la cancelación de su deuda con el FMI, de US$ 15.500 millones.

Él en ese tiempo presidente del Banco Central, Martín Redrado, explicó que tras el pago al FMI, la entidad quedaría con más de 17.000 millones de reservas, lo que equivalía a los $55.000 millones de bases monetarias.

Redrado y la ministra de Economía, Felisa Miceli, explicaron que mediante un decreto de necesidad y urgencia se estableció que las reservas que excedan a la cobertura de la base monetaria se podrán disponer libremente para pagos a organismos internacionales.

El 3 de enero de 2006, se produjo el pago dando fin a una relación económica dependiente que comenzó en 1956, con el primer crédito del organismo otorgado al entonces dictador Pedro Eugenio Aramburu.