Diputados del bloque radical afín al Gobierno manifestaron su entusiasmo por el nuevo proyecto de Ficha Limpia que impulsa el oficialismo. Según señalaron, el texto que circula incluye avances sustanciales, como la extensión de las restricciones a ocupar cargos públicos a funcionarios designados, que no pasan por el voto popular, pero tienen roles estratégicos en el Estado, como ministros, secretarios y subsecretarios.

Soledad Carrizo, secretaria parlamentaria del bloque radical, calificó la propuesta como "muy interesante" y resaltó la intención de dotar de mayor profundidad y precisión al mecanismo de exclusión. "El proyecto del Ejecutivo es más complejo y extenso que el dictaminado en Diputados. Presenta definiciones procesales claras sobre cómo implementar la Ficha Limpia", declaró Carrizo, quien, no obstante, advirtió que el texto deberá analizarse en detalle cuando ingrese formalmente al Congreso.

Ficha Limpia: un terreno políticamente incómodo

La iniciativa, que fue firmada por el presidente Javier Milei antes de viajar a Estados Unidos, no solo propone restricciones para candidatos condenados por delitos de corrupción, sino que también amplía el alcance a cargos designados. 

Según fuentes oficiales, este cambio busca cerrar vacíos legales y evitar que personas con antecedentes judiciales puedan eludir las restricciones al no ser electas directamente.

La medida, además, podría tener un impacto político significativo. De ser aprobada, la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner quedaría inhabilitada para competir en las próximas elecciones, algo que en ciertos sectores se interpreta como uno de los objetivos no declarados del proyecto.

La posición radical

El bloque radical parece dispuesto a acompañar la propuesta oficial. Carrizo valoró el diálogo entre el Ejecutivo y el Congreso en torno a esta iniciativa y destacó que el proyecto podría complementarse con el trabajo realizado previamente en Diputados. "Es clave compatibilizar ambos enfoques para llegar a una ley sólida y aplicable", afirmó.

El proyecto, que se tratará en sesiones extraordinarias, reabre el debate sobre la transparencia en la política y los límites éticos para quienes buscan ejercer el poder. Mientras tanto, desde sectores opositores, ya se anticiparon críticas, al señalar que la Ficha Limpia podría ser utilizada con fines electorales más que como un genuino esfuerzo por combatir la corrupción.