José "Pepe" Mujica, ex presidente de Uruguay, murió hoy a los 89 años por complicaciones derivadas de un cáncer de esófago. El actual mandatario uruguayo, Yamandú Orsi, confirmó la noticia desde su cuenta oficial en la red social X: "Con profundo dolor comunicamos que falleció nuestro compañero Pepe Mujica. Presidente, militante, referente y conductor. Te vamos a extrañar mucho Viejo querido. Gracias por todo lo que nos diste y por tu profundo amor por tu pueblo".

Mujica se había retirado de la actividad política en los últimos años debido al deterioro de su salud y transitaba el final de su vida en estado terminal, con cuidados paliativos. Vivía en su chacra a las afueras de Montevideo junto a su esposa, Lucía Topolansky. En diciembre de 2024 se sometió a una intervención quirúrgica, y en enero de 2025 anunció públicamente que el cáncer se había extendido.

En una entrevista con la revista Búsqueda afirmó: "Ya terminó mi ciclo. Sinceramente, me estoy muriendo. Y el guerrero tiene derecho a su descanso". Y agregó: "Estoy condenado, hermano. Hasta acá llegué".

El ex mandatario había nacido el 20 de mayo de 1935 y presidió Uruguay entre 2010 y 2015. Su figura se asoció a la austeridad, la coherencia ideológica y el compromiso con los sectores populares. Proveniente del Movimiento de Liberación Nacional – Tupamaros, estuvo preso durante la dictadura uruguaya y, años después, ocupó cargos legislativos y ejecutivos.

En una de sus últimas declaraciones públicas, resumió su actitud ante la vida con una frase que dejó huella: "Al fin y al cabo, que me quiten lo bailado".

Su legado generó una ola de repercusiones en toda la región. En Argentina, dirigentes del peronismo destacaron su figura como referente político y ético. Juan Manuel Abal Medina lo definió como "un enorme compañero y un gran maestro", y señaló que "jamás bajó los brazos, que nunca escondió sus ideales, que siempre alzó las banderas de la justicia social, la humildad y la coherencia".

Francisco Cafiero escribió que Mujica fue "un militante sin tiempo, sus ideas inspiraron a millones que seguimos soñando y luchando por un mundo mejor". Por su parte, el intendente de La Plata, Julio Alak, lo recordó como "un referente de la humildad, la coherencia y la lucha por la justicia social en América Latina".

El ex presidente Alberto Fernández también expresó su pesar: "Pepe Mujica ha sido un ejemplo para una política que todo lo banaliza. Un ejemplo de austeridad en una sociedad que premia a quienes amasan fortunas". Y agregó: "Sin serlo, ha sido el mejor de los cristianos. Sin Francisco y sin Pepe, el mundo se entristece y se debilita".