En camino a convertirse en el primer empresario "arrepentido" de la causa por presunta corrupción en la obra pública, el ex CEO de Isolux, Juan Carlos de Goycoechea, tiene previsto ampliar hoy su declaración indagatoria con el objetivo de que le reduzcan la pena y le garanticen la libertad en lo inmediato.

El ejecutivo de la compañía española en la Argentina es uno de los empresarios que quedó detenido a raíz del pago de coimas a funcionarios del gobierno anterior, según los escritos que Oscar Centeno, ex chofer de Roberto Baratta, habría realizado en una serie de cuadernos, que ya no existen debido a que los quemó en la parrilla de su casa de Vicente López. Sin embargo, el nombre de Isolux llegó mucho antes a las tapas de los diarios, cuando a comienzos de este año Perfil publicó que esa empresa vendió seis parques eólicos a la familia Macri a través de una polémica operación.

Isolux también está conectada al macrismo de la mano del Gobierno porteño, que encabeza Horacio Rodríguez Larreta, tras haber ganado uno de los tramos de la megaobra del Paseo del Bajo. Durante la administración kirchnerista, la multinacional española construyó la usina de carbón de Río Turbio, cuya obra demandó en un comienzo 485 millones de dólares y, en 2015, ese presupuesto trepó a 1.631 millones de dólares.

Hasta el momento, Goycoechea fue el único entre los dueños y ex CEO que están en prisión que se ofreció a declarar como "arrepentido" a cambio de recuperar su libertad, lo que debe ser analizado por el fiscal Carlos Stornelli y el juez federal Claudio Bonadio, quienes llevan adelante la investigación.

A través de su abogado, Jorge Landaburu, el ex titular de Isolux dijo estar dispuesto a revelar detalles de la presunta trama de corrupción en torno a la obra pública y pidió también ser incluido en el Sistema de Protección de Testigos, al igual que Centeno, a pesar de que éste último tuvo varias contradicciones en su declaración respecto a dónde estaban los originales de los cuadernos hasta que finalmente manifestó que ya no existían porque tiempo atrás los incineró.

Además de Goycoechea, Bonadio hoy podría tomarle declaración a un grupo de empresarios y ex funcionarios nacionales que estarían vinculados a la causa, pero que aún no tienen orden de detención.

Por otra parte, el magistrado podría en los próximos días pedir la captura internacional de Oscar Thomas, ex director ejecutivo del Ente Binacional Yacyretá, el único de los imputados que permanece prófugo. El sábado último fue detenido el directivo del grupo Pescarmona Francisco Valenti, que volvió a la Argentina tras unas vacaciones en Dubai, y así ya son 17 los apresados por esta causa.

Tanto los empresarios como los funcionarios detenidos aparecen en las copias de los cuadernos de Centeno, quien habría tomado nota en detalle de cada uno de los viajes que realizaba Baratta cuando era secretario de Coordinación del Ministerio de Planificación Federal. En esos escritos figuran presuntas coimas que los directivos de diferentes compañías le habrían pagado a una parte de los integrantes de esa cartera por trabajos de obra pública.