Tras tomar nota del nuevo banderazo opositor que durante la jornada de ayer tuvo como epicentro el obelisco y replicas en diferentes lugares del país, el gobierno nacional, con el propio presidente Alberto Fernández a la cabeza, decidió salir en bloque a cuestionar a la oposición y al ex presidente Mauricio Macri, al considerar que buscan "reducir la política a los discursos del rencor y del odio" y "montarse" sobre la pandemia de coronavirus para convocar a un sector de la población desde el "hartazgo".

Al encabezar un acto en Avellaneda, donde la Refinería Raízen, anunció una inversión por 715 millones de dólares para los próximos tres años, Fernández, en obvia alusión al gobierno de su antecesor, señaló que "en los últimos cuatro años la mentira fue una constante", lo que habla de un tiempo "donde el gobierno se olvidó de la gente, y eso es imperdonable".

Precisó además, que "en tiempos en que dicen que las fábricas se van, que las empresas se van, que los capitales se van, acá hay una empresa que pone 700 millones de dólares confiando en una Argentina que crece".

Por su parte, el jefe de gabinete; Santiago Cafiero, advirtió que de las manifestaciones de protesta participaron quienes están "identificados con un partido político que no acepta que perdió las elecciones hace un año", agregó que "no se va a cambiar" la agenda del Gobierno nacional, y planteó que Macri tiene una "lectura ridícula" de su derrota electoral.

"El derecho a manifestarse es parte de la democracia, pero también hay que aceptar la diversidad: no son la gente, no son todos, no son el pueblo; la Argentina es mucho más diversa", planteó Cafiero, 

En tanto que el ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, dijo no tener dudas de que la oposición "trata de montarse en esta crisis" por la pandemia "convocando al hartazgo", advirtió que Juntos por el Cambio apuesta a que, "radicalizando el discurso tendrá un grupo duro que les responda", pero -advirtió- "la campaña empieza el año que viene y hoy la gente está preocupada por otra cosa".

El funcionario consideró además, como "desopilante que Macri se presente como resguardo de los valores republicanos".

A su turno, el titular de la cartera de Defensa, Agustín Rossi, dijo entender que desde la oposición "digan que la cuestión de la pandemia merece objeciones y críticas, pero fijémonos lo que pasa en el mundo" y subrayó que no discute "que haya miradas distintas" sobre la pandemia, pero lo objetable es que estas "sean tan virulentas".

El santafesino consideró además, como "un despropósito" la protesta que tuvo lugar frente a la casa de Cristina, al tiempo que advirtió que "el discurso de Macri es peligroso y tiene proclamas de ruptura institucional".

La protesta frente al domicilio de la vicepresidenta también recibió cuestionamientos desde el bloque de senadores del Frente de Todos, quienes a través de un documento, rechazaron la convocatoria y responsabilizaron por ello a "los medios de comunicación hegemónicos", que pretendieron "redireccionar" la convocatoria", en un intento por "reducir la política a los discursos del rencor y del odio".