La figura del líder del Frente Renovador, Sergio Massa, adquirió en las últimas semanas un rol protagónico en el marco de las negociaciones entre el Gobierno nacional y el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Pero además, como titular de la Cámara de Diputados, fue el hombre sobre el que se recostó el Presidente Alberto Fernández a la hora de consensuar el nombre del reemplazante de Máximo Kirchner tras la renuncia del dirigente camporista a la titularidad del bloque del Frente de Todos en la Cámara baja.

La cercanía del mandatario con Massa va en contraposición al distanciamiento con Máximo Kirchner y parte del kirchnerismo duro y comienza a marcar la tónica que pareciera busca imprimirle a su Gobierno en esta nueva etapa de gestión.

Esta alianza estratégica del albertismo con los renovadores no solo se ve plasmada en gestos, sino que además, se expresa en el desembarco de nuevos funcionarios pertenecientes a ese espacio en cargos del Poder Ejecutivo.

Para el caso, el último viernes el Boletín Oficial dio cuenta de la Designación de la concejal por el partido de Tigre, Micaela Ferarro Medina -quién responde a Malena Galmarini-, al frente de la Secretaria de Abordaje Integral del Ministerio de Desarrollo Social en reemplazo de la renunciante profesora Mirta Alicia Soraire.

Ese mismo día fue designada la ex diputada bonaerense y actual concejal de Zarate, Micaela Morán, como Subsecretaria de  Planificación y Coordinación del Ministerio de Transporte de la Nación, cartera que comanda otro hombre del riñón del massismo como lo es Alexis Guerrera.

La andanada de nombramientos incluyó a la diputada nacional e integrante del Frente Renovador, María Liliana Schwindt, quién en reemplazo de Débora Giorgi, pasó a desempeñarse como Subsecretaria de Acciones para la Defensa de las y los Consumidores de la Secretaría de Comercio Interior  del Ministerio de Desarrollo Productivo que conduce Matías Kulfas.

En un año sin comicios nacionales a la vista, el mandatario necesita fijar su propia agenda, rediseñar sus prioridades y comenzar a preparar el terreno, si es que  en el mejor de los casos, pretende ir por la reelección en 2023 y para ello, necesita contar con dirigentes de su confianza, como los son Sergio Massa y parte de su tropa.