El espacio Alternativa Federal, integrado inicialmente por los gobernadores Juan Schiaretti (Córdoba) y Juan Manuel Urtubey (Salta), el senador Miguel Ángel Pichetto y el principal referente del Frente Renovador, Sergio Massa, logró sentar a su mesa a otros siete mandatarios provinciales y el dato político logró meter a esa alianza en la discusión electoral rumbo a 2019 y puso la interna del peronismo al rojo vivo.

Aún resta saber si alguno de los otros jefes provinciales del justicialismo que el miércoles no estuvieron en la Casa de la provincia de Entre Ríos cruzarán la vereda -si es que lo hacen-, pero las presencias del anfitrión Gustavo Bordet, de Juan Manzur (Tucumán), Domingo Peppo (Chaco), Rosana Bertone (Tierra del Fuego), Sergio Casas (La Rioja), Hugo Passalacqua (Misiones) y Mariano Arcioni, le insufló aires al hasta ese momento alicaído Massa y compañía, pero la foto logró sacudir al PJ institucional, poniéndolo en guardia.

Uno de los primeros en salir a hablar tras el encuentro fue Peppo, quien dijo que su espacio contará "con candidatos con experiencia como Sergio Masa o Miguel Pichetto" buscando de esa manera posicionarlos en su grilla de ofertas.

"Queremos un peronismo transparente y concreto, que genere un gran acuerdo, dejando atrás una historia de división y trabajar juntos por empleo, crecimiento, mejorar la situación social; que genere desarrollo federal y equitativo para nuestro país, contando con el apoyo y participación de los gobernadores como máxima expresión federal", enfatizó además el chaqueño.

La alianza que será presentada formalmente en sociedad en diciembre próximo, incluirá la creación de un interbloque en el Congreso entre los legisladores que integran Argentina Federal y los pertenecientes al Frente Renovador.

Urtubey, menos dialoguista y más confrontativo, señaló por su parte que competir en una interna con la senadora Cristina Kirchner por dentro del PJ "sería estafar a la gente" porque "lo que queremos es ofrecer una alternativa diferente a eso, si queremos hacer algo diferente y vamos todos junto sería muy contradictorio".

También Pablo Kosiner, jefe del bloque Justicialista en Diputados, hizo oír su voz al afirmar que el peronismo "alternativo" y el espacio que vienen construyendo el kirchnerismo y una parte del peronismo institucional representan "dos construcciones diferentes", por lo que no se cruzarán en unas primarias comunes, al tiempo que dijo entender que "la Argentina merece salir de la polarización o grieta".

En la vereda del peronismo "institucional", desde donde apuestan por una gran alianza para derrotar a Macri que incluya a Cristina, buscaron bajarle el precio a la foto del miércoles: "Sacando a Córdoba, el electorado de las provincias sentadas a esa mesa no llegan a conformar el caudal electoral de un distrito como La Matanza, pero además en su mayoría fueron perdedores en las últimas elecciones", señaló una fuente partidaria, la que agregó que un dato importante es que a esa cita faltaron "caudillos como Verna o Insfrán".

Otro dirigente cercano a la conducción, afirmó que "algunos de los que se fueron van a terminar volviendo porque no hay avenida del medio" y consideró que "a ellos les falló la operación Barrionuevo, pero vamos a consolidar al PJ institucional y el sello no nos lo roban nunca más".