En un operativo de máxima reserva, el empresario Lázaro Báez llegó por la mañana de ayer a la cárcel de Ezeiza, donde fue ingresado directamente al hospital penitenciario. Según confirmaron fuentes judiciales y del Servicio Penitenciario Federal ante La Opinión Austral, el empresario cuenta con una celda individual con baño y ducha debido a su estado de salud.

El ingreso se produjo cerca de las 11, luego de un traslado combinado por tierra y aire, realizado a través de un vuelo privado del Estado destinado para este tipo de operativos especiales. Durante todo el trayecto, Báez estuvo acompañado por personal médico que supervisó su estado de salud. Fuentes cercanas confirmaron que la prioridad en la atención fue tratar el sangrado que lo aqueja hace días, así como también las posibles complicaciones intestinales, un cuadro de salud que ya había sido advertido por su defensa.

El traslado de Báez fue dispuesto en carácter de urgente por Néstor Costabel, juez de ejecución penal, luego de que el magistrado Claudio Vázquez ordenara su derivación a raíz de su preocupante cuadro.

Tal como había anticipado La Opinión Austral, el traslado desde la Unidad Penitenciaria Federal N° 15 de Río Gallegos se concretó durante la jornada del sábado, en medio de críticas desde el entorno familiar y legal del empresario por la falta de notificación previa.

La salud de Báez sigue siendo el punto más sensible de la causa. Según indicaron desde entorno, el empresario presenta episodios de sangrado con posibles complicaciones intestinales, lo que motivó el pedido de estudios médicos.

Días atrás, el propio Servicio Penitenciario Federal había manifestado que no contaba con los medios logísticos para concretar el traslado debido al cierre del Aeropuerto de Río Gallegos por refacciones y la falta de vuelos programados en El Calafate.

Si bien evitó brindar detalles sobre la logística, el Servicio Penitenciario Federal aclaró que se trató de un procedimiento de seguridad previsto por protocolo y detalló que Báez permaneció bajo custodia permanente a lo largo de todo el trayecto.