El primero en tomar nota del pedido del interbloque de Juntos por el Cambio para que se bajen los sueldos en los tres Poderes del Estado fue el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, que por estas horas analiza realizar un recorte de las dietas de los legisladores cercano al 40%. La idea es llegar a un acuerdo con la oposición durante el fin de semana; sin embargo, desde el espacio que integran PRO, la UCR y la Coalición Cívica-ARI adelantaron que cualquier ajuste en los salarios "sólo tiene sentido si se aplica a todos los funcionarios nacionales".

En momentos en los que todavía es incierto el alcance de la pandemia de coronavirus en Argentina y un sector de la sociedad y la oposición reclaman "gestos políticos" al Gobierno nacional, Massa dejó trascender que estaba dispuesto a llevar adelante un ahorro de $200 millones en cinco meses para derivarlos a la Cruz Roja y el sistema sanitario. Aunque no hay nada cerrado, los fondos saldrían del recorte de los sueldos de las diputadas y diputados y del personal de alto rango de la Cámara baja, pero también de un achique en la cantidad de pasajes aéreos que recibe cada legislador. Recién se tomará una decisión entre el viernes y lunes próximo, luego de una reunión "virtual" entre los jefes de los distintos bloques.

"Se están evaluando diferentes alternativas, pero se necesita un acuerdo con el resto de las fuerzas políticas", señalaron fuentes de la bancada del Frente de Todos. Según explicaron, más allá del ahorro, el objetivo es "seguir cerrando la grieta". En Juntos por el Cambio leyeron el gesto del titular de Diputados como un modo de "redoblar la apuesta para desactivar el reclamo". "El problema fue que algunos en el interbloque corrieron detrás de los caceroleros", apuntó un diputado de ese espacio, que además subrayó que la idea original era "generar un aporte solidario del sector público al sector privado".

En sintonía con los cacerolazos del lunes pasado y luego de que el presidente Alberto Fernández planteara que no tolerará despidos en medio de la pandemia, desde Juntos por el Cambio propusieron crear un fondo de emergencia con el 30% de los ingresos de la totalidad de los cargos jerárquicos del Poder Ejecutivo Nacional, el Legislativo y el Judicial, más el Ministerio Público Fiscal, los directorios de las empresas públicas y organismos descentralizados.

Aún cuando en el interbloque de Diputados de Juntos por el Cambio hay posturas encontradas respecto de cómo pararse frente a la oferta de Massa, sobre todo teniendo en cuenta que en el Senado son reacios a un recorte de sueldos, insistirán con el texto de la carta que le enviaron al jefe de Estado. "Que el recorte solo lo haga la Cámara de Diputados no ayuda ni al sostenimiento de un hospital. Sería importante el esfuerzo de todos aquellos que percibimos del Estado un sueldo significativo, políticos o judiciales de alto rango que ganan más de $100.000", puntualizó el titular de la bancada de PRO, Cristian Ritondo. En tanto, los seis diputados radicales de Mendoza decidieron "donar el 50%" de su dieta para "la compra de kits y test rápidos para ser distribuidos en hospitales públicos" de esa provincia.