92 ANIVERSARIO DE LA CENTRAL

Pablo Moyano reconsideró renuncia y la CGT mantiene una convivencia forzada

La cena en Olivos del Presidente y la mesa chica de Azopardo abrió nuevas heridas internas. El Frente Sindical logró contener el malestar de su líder

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El referente de Camioneros Pablo Moyano continuará ocupando su rango de triunviro en la CGT. El dirigente evaluó este martes pegar el portazo luego del malestar inocultable que le provocó haber quedado fuera de la comitiva que cenó el lunes por la noche en la Quinta de Olivos con el presidente Alberto Fernández. Fue un encuentro convocado de urgencia por el Frente Sindical (Fresimona) en la sede de Camioneros el que logró bajar decibeles. Allí, además de respaldar a Moyano, se consideró que "el lugar que tenemos en Azopardo y la unidad de la central ameritan a continuar dentro de la estructura".

 

El camionero había comunicado su decisión de "no va más" horas antes y las deliberaciones se desarrollaron a partir de ese semblante. Sin perjuicio de que Moyano continuará, la solidez del triunvirato no tiene garantías en el largo plazo, por este desencuentro post cena que fue la válvula de presión en el mismo martes donde la CGT cumple 92 años, pero también incluye una secuencia de tópicos salariales, políticos, estratégicos y hasta de comunicación.

La charla que, sin definiciones de fondo, mantuvieron los integrantes de la mesa chica en Olivos con Fernández versó sobre temario conocido, entre ellos la dinámica paritaria, el acto del 17 de Octubre en San Miguel de Tucumán y la posibilidad de que se decrete un bono de fin de año.

Vale recordar que aquella convocatoria del ministro Sergio Massa para empresarios y gremios a fin de ocuparse de mejorar los sueldos de menor valía, si bien fue anunciada el día de la jura del nuevo titular de Economía, todavía mantiene el rótulo de "pendiente". Las sumas fijas que planteó Moyano como medicina y, en operativo clamor, todo el arco sindical con afinidad K, siguen en cero.

"Yo te avisé"

El Presidente y su gabinete incluso fueron destinatarios de críticas de Moyano tanto en la marcha del 17 de Agosto y hace algunas horas por el prolongado conflicto del gremio de neumáticos por su revisión paritaria, que comenzó en marzo y sigue en punto muerto y con alta beligerancia excediendo el foro gremial. "Pasaron cinco meses y el ministerio de Trabajo no logró encausar esto, era sabido que iba a pasar y pasó", dijo Moyano para recordar que intercedió en favor del Sutna ante diversos funcionarios.

Respecto a la CGT propiamente dicha, algunos voceros del Fresimona, que también en la previa del Congreso de Parque Norte habían sido claves para convencer a Moyano para que asumiera como triunviro, traccionaron por estas horas en un "operativo contención" a fin de convencerlo de que "el que abandona pierde". Esos mismos dirigentes asumen que por los carriles recorridos desde noviembre del año pasado a la fecha, cualquier otro cortocircuito provocará que salten algo más que fusibles en la CGT.

Como publicó este diario, hay conciencia tanto en el Fresimona como en la Corriente Federal (CFT) de que los números no les ofrecen mayoría en Azopardo. En ese convencimiento, Hugo Moyano mantiene una postura conciliadora pese a los comentarios cada vez más encendidos que le llegan desde su tropa.

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