La Federación Argentina de Empleados de Comercio (Faecys) y las cámaras empresarias acordaron su negociación paritaria. La figura pactada fue una "gratificación extraordinaria, no remunerativa", de $30.000 en 6 cuotas.

La negociación, luego de semanas de turbulencias, llegó a buen puerto ante el Ministerio de Trabajo. Quedaron detrás meses de tironeos e incluso la aplicación de la conciliación obligatoria por 15 días hábiles.

Las cuotas se abonarán entre octubre y marzo 2021 según lo rubricaron la Faecys, la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC) y la Unión de Entidades Comerciales Argentinas (Udeca)

Además, según se había negociado antes de la “etapa crítica de la paritaria” el bono de $4.000 del decreto 14/2020 y los $2.000 pactados en el rubro mercantil eb febrero se incorporarán al básico.

"Se logró un acuerdo en la paritaria del gremio más grande del país, en el contexto de una pandemia que jaqueó a la economía. Es un momento adverso para la actividad mercantil, pero se obtuvo una importante mejora para más de un millón de empleados", resumió el titular de la Facecys Armando Cavalieri.

Más allá de las fotos protocolares con la firma del acuerdo en la cartera laboral, la supervisión del ministro de Trabajo Claudio Moroni y otros detalles, la antesala paritaria tuvo aristas fortísimas entre el gremio y las cámaras como también efectos colaterales en la interna de los mercantiles.

Cuando semanas atrás Cavalieri daba por cerrado el acuerdo, a punto tal que lo anunció y horas después CAME desmintiera el pacto con el histórico referente mercantil, en el sindicato hubo voces críticas con tenor similar a las que se escucharon en la última elección del gremio.

La situación fue empeorando, a punto tal de que el resto de las cámaras empresarias hicieron causa común de rechazo con CAME, entidad que además vive una fortísima lucha puertas adentro y con cruces mediáticos. 

Fue allí que Cavalieri no dudó en disparar a los empresarios por “incumplimiento de la palabra empeñada”, y llegó la instancia de la tregua obligatoria fijada por Trabajo.

Más que atenta a cada instancia estuvo la Casa Rosada, ya que siempre en escenario de la crisis Covid, el acuerdo paritario de Comercio era esperado con expectativa para engrosar el bajo promedio de convenios celebrados en pandemia. No sólo por el 1.200.000 de empleados/as que cobija este acuerdo, sino porque se trata de una de las negociaciones referenciales del ámbito laboral y sus efectos llegan a otras organizaciones de trabajadores.

Pasadas las horas de tormenta el sindicato realzó su compromiso para resguardar las fuentes de trabajo y de recuperar el poder adquisitivo de los trabajadores comprendidos en el convenio colectivo 130/75. "La actividad y los pequeños comercios fueron golpeados por el ASPO, por lo que la actualización salarial fue un paso fundamental", puntualizó Cavalieri.

En efecto, el impacto de la emergencia sanitaria es innegable, a punto tal que el Sindicato de Comercio debió apelar al programa ATP para abonar el sueldo de los empleados que cumplen servicios en esa estructura sindical para la atención de los afiliados, como publicó en su momento BAE Negocios.

En enero 2021 el gremio y las cámaras patronales retomarán el diálogo paritaria con eje en la evolución inflacionaria como otras variantes que afecten el poder adquisitivo de los sueldos.

Para el detalle que apuntó la Cámara de Comercio (CAC) las 6 cuotas pactadas tendrán impacto en los adicionales por presentismo y antigüedad, hasta la finalización del convenio suscripto a fines de marzo.