#17A

Rotundo rechazo del oficialismo al "banderazo" opositor convocado para hoy, 17 de agosto

Funcionarios del Gobierno cuestionaron la movilización al advertir que implica un gran riesgo de contagio por la aglomeración de personas. Miembros de Juntos por el Cambio pidieron "prudencia" pero pidieron "entender el hartazgo"

BAE Negocios

Impulsadas en las redes con el hashtag #17A y apoyadas por dirigentes de Juntos por el Cambio, como la exministra de Seguridad, Patricia Bullrich y militantes del macrismo como el actor Luis Brandoni, este lunes 17 de agosto la oposición convocó a realizar marchas en todo el país en contra del Gobierno a partir de las 16, con una movilización principal en la Ciudad de Buenos Aires hacia el Obelisco como punto central.

La convocatoria tiene un marcado sesgo anticuarentena, a pesar de que Argentina se acerca a los 300 mil casos de coronavirus y acumula más de 5.700 muertes por Covid-19 en todo el país. En territorio porteño, los contagios alcanzan los 77.491. En este contexto, funcionarios del Gobierno hicieron duras críticas contra el llamado a movilizarse y advirtieron que la aglomeración de personas que puede darse implica un gran riesgo de contagio.

El ministro de Ciencia y Tecnología, Roberto Salvarezza, aseguró que el llamado "banderazo" representa "una clara irresponsabilidad de un sector minoritario" y aseguró que la protesta traerá "consecuencias en el número de contagios". También remarcó que "en todos los países del mundo se trata de evitar este tipo de situaciones porque lo que hace es potenciar el riesgo".

"No hay ninguna duda de que en la Argentina existe una minoría irracional y fanática que motorizada por algunos medios de comunicación que no duda en tomar actitudes que perjudican a los demás. Es como el caso del dióxido de cloro, que aparece en los medios y termina con la muerte de un chiquito", expresó Salvarezza en declaraciones radiales.

El ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, alertó que "circula mucho el virus y hay que ser muy cuidadoso". "Es respetable todo tipo de expresión, pero es un momento de cuidarnos y no salir a la calle y amuchar mucha gente", sostuvo en diálogo con radio Continental.

 

La titular del PAMI, Luana Volnovich, cargó contra dirigentes opositores que alientan a asistir a la movilización. "Si alguien convocara a mi mamá a una marcha, lo mato. Jugar con la salud de mi vieja, de ninguna manera", advirtió.

Al respecto, señaló que "cualquier persona que convoque a una instancia que ponga en riesgo a cualquier persona" estaría haciendo "una locura".

Andrés Larroque, ministro de Desarrollo de la Comunidad bonaerense, opinó que en la oposición "hay un sector liderado por Macri con total desparpajo que está convocando a estas movilizaciones" y remarcó que aunque "seguro hay gente que se moviliza de buena fe" los organizadores de la marcha "saben muy bien lo que están generando".

"No hay ninguna espontaneidad en la marcha de hoy. Hay autores intelectuales muy claros como Macri, que ni siquiera está en al país", indicó el funcionario, e insistió en diferenciar "a los instigadores intelectuales de aquellos que pueden participar de buena fe".

El embajador argentino designado en España, Ricardo Alfonsín, consideró: "No me parece el ejercicio prudente de un derecho. En circunstancias como estas, tenemos que extremar los cuidados. No me parece que se cumpla con esa condición en esa marcha", dijo Alfonsín en diálogo con Télam Radio.

Alfonsín agregó que la convocatoria "no solamente está poniendo en riesgo la salud de los que asisten, sino del conjunto", que incluye también "a los médicos y enfermeras que eventualmente tengan que atender a los que se enfermen". "Ponen en riesgo también la capacidad del sistema, para dar respuestas justo en un momento en el que hay que tener mas cuidado que nunca", advirtió.

Por su parte, el diputado nacional y secretario general de la CTA, Hugo Yasky, cuestionó: "Si Argentina estuviera gobernada por los que convocan a la marcha tendríamos los mismos muertos que Brasil".

El gremialista apuntó además contra el diario La Nación: "Convoca a la marcha como si se tratara de un acto patriótico". "No tengo dudas que el objetivo es desgastar y desestabilizar al Gobierno", expresó.

 

Críticas moderadas en la oposición

Adolfo Rubinstein, titular de la Secretaría de Salud durante del gobierno de Mauricio Macri, aseguró que no irá al banderazo contra el Gobierno, ya que la marcha "no es beneficiosa". Sin embargo, no cuestionó las motivaciones de quienes se movilizarán ni tampoco a los convocantes: "No es el mejor momento para tener aglomeraciones en la calle, pero hay que entender el hartazgo", sostuvo en declaraciones radiales.

"No me parece recomendable salir a la calle, pero es algo que está fuera de control porque la gente tiene una necesidad social de salir a la calle", planteó, y consideró que con el pasar de la cuarentena "se fue perdiendo objetividad". También aseguró que "no es una convocatoria de ningún partido político", y aclaró: "Yo no voy a ir".

En contraste, el ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, alentó a que "quien quiera (manifestarse), que lo haga, pero con todos los cuidados correspondientes", y pidió "que el esfuerzo de la población no corra riesgo por la necesidad de un subgrupo de expresarse".

"Las expresiones populares deben hacerse dentro del contexto que estamos viviendo", con lo cual se requiere "que todo el mundo tome las máximas precauciones para que no empeore la situación epidemiológica", sostuvo en una conferencia de prensa esta mañana.

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