Se agudizan las diferencias dentro de la CGT, encaminada hacia una fractura
Las repercusiones por la marcha del #17A y el escenario político a punto de eclosión. Carlos Acuña se apresta a dejar el triunvirato en medio de un éxodo de gremios
Las repercusiones por la última marcha de la CGT dejaron a esa confederación al borde de una fractura. Esta noche daban por seguro que más de 20 organizaciones sindicales, entre ellas algunas de sumo poderío, dejarán la conducción. "La decisión está tomada en un 97% y diría que es irreversible", dijo una fuente de los gremios que definen por estas horas retirarse de la central.
A tal punto es la situación que además otras fuentes consignaron que el triunviro Carlos Acuña (Estacioneros) ya anticipó la decisión a otros pares. Por otra parte, el disgusto de Pablo Moyano ante sus más cercanos era esta noche inocultable.
En la siempre dificultosa convivencia cegetista, tanto la movilización como el escenario político de esta semana detonaron malestares en diversos núcleos.
La cuestión de los fondos para las obras sociales sindicales es uno de los ejes del malestar, incluso por los recortes dispuestos por Economía, ahora las fuentes consultadas por este diario ponían como eje de discordia dominante las divergencias en la friccionada convivencia de sindicatos "nunca K" y los que respaldan al sector liderado por la vicepresidenta.
A tal punto que el comunicado emitido por la CGT en respaldo de Cristina generó reacciones indisimulables. Escaramuzas que ya venían en alto tono cuando finalmente privó la moción para movilizar el #17A.
No obstante hay otros dirigentes que tratan de evitar la crisis apelando a sus buenos oficios incluso con sindicatos con los que no comparten el mismo prisma político. Entre quienes asumen que no hay demasiado espacio para "sostener la unidad", hay sindicatos del transporte y servicios.
Peronismo y kirchnerismoPor otra parte, en el vértigo político que derivó del pedido de condena a Cristina Fernández derivó en que diferentes sindicatos alineados al kirchnerismo plantearan la posibilidad de decretar un paro nacional en respaldo de la vicepresidenta.
En cuanto a otros datos en superficie, no fue una señal menor que a la asunción de Walter Correa como nuevo ministro de Trabajo bonaerense sólo asistieron dirigentes del Frente Sindical (Fresimona), la Corriente Federal (CFT) y la CTA que lidera Hugo Yasky.
Entre los que preparan la ruptura consideraron "inadmisible" la actitud de Pablo Moyano durante la marcha de la semana pasada, cuando decidió montar una suerte de acto paralelo previo a la movilización, con conceptos que reforzó más tarde en la conferencia de prensa que los triunviros ofrecieron más tarde.
Al mismo tiempo quienes respaldan a Moyano consideraron que no dejar algo más que un comunicado "era equivalente a no marchar contra nadie". Con el vértigo de las horas lo que se vislumbraba como una posible fractura definida desde el Fresimona como la CFT, se termina detonando desde sectores sindicales dialoguistas y peronistas antikirchneristas.
"La grieta de la grieta", ironizó otro vocero gremial ante la consulta de BAE Negocios, respecto al delicado equilibrio de la CGT, que comenzó desde el congreso de noviembre de 2021 en Parque Norte, con acuerdos en tiempos de descuento, sin poder de fuego considerable y, en palabras de varios dirigentes, "unidos por el espanto".