La OMS promueve el método madre canguro para mejorar la supervivencia de bebés prematuros
Esta técnica, que combina contacto piel con piel y lactancia materna, reduce la mortalidad neonatal y mejora el desarrollo cognitivo. La OMS insta a su implementación universal, involucrando a padres y familiares en el cuidado neonatal.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha emitido una nueva guía de práctica clínica que recomienda el método madre canguro para bebés prematuros y con bajo peso al nacer.
Esta técnica, que combina el contacto piel con piel prolongado con la lactancia materna, ha demostrado beneficios significativos en la supervivencia de los recién nacidos.
Según la OMS, todos los bebés prematuros deben recibir este método inmediatamente después del parto, a menos que presenten complicaciones graves que requieran atención urgente.
El método madre canguro se asocia con una reducción de más del 30% en la mortalidad neonatal, una disminución del 70% en la hipotermia y una reducción del 15% en las infecciones graves.
Además, promueve una mayor ganancia de peso y un mejor desarrollo cognitivo a largo plazo. Jeremy Farrar, subdirector general de la OMS, ha afirmado que esta técnica no solo es una intervención clínica, sino que también empodera a las madres y transforma la atención neonatal.
La OMS ha subrayado que, aunque las madres suelen ser las principales cuidadoras, los padres y otros familiares también pueden participar en la aplicación del método madre canguro.
La nueva guía ofrece orientación detallada para profesionales de la salud y cuidadores, destacando la importancia de crear entornos propicios en los centros de salud para su implementación. Además, se enfatiza la necesidad de políticas de apoyo y capacitación del personal para garantizar el éxito de esta práctica.
En el marco del Día Mundial de la Prematuridad, la OMS ha instado a los gobiernos y sistemas de salud a priorizar la atención de calidad para los bebés prematuros.
Esto incluye garantizar instalaciones especializadas con personal capacitado y acceso a equipos y medicamentos esenciales. Per Ashorn, jefe de la Unidad de Salud y Desarrollo Neonatal e Infantil de la OMS, ha enfatizado que ningún recién nacido debería morir por causas prevenibles, subrayando la importancia de ofrecer cuidados especiales a todos los bebés.