Con el transporte público en la mira como foco de contagio, en pandemia creció el uso de formas alternativas de desplazamiento. Varias de ellas tienen el camino despejado para ganar protagonismo una vez que pase esta emergencia.  

Tras un año sin precedentes para la movilidad en el mundo en el que Argentina llegó a alcanzar una disminución del 90% de kilómetros recorridos en el país, la paulatina vuelta a la normalidad plantea el interrogante de qué caminos deben tomar las ciudades a la hora de alcanzar una movilidad urbana con modos de transporte más sostenibles.

A pesar de la necesidad de recurrir a un transporte más sustentable, la pandemia ha fortalecido la utilización de medios de transporte privados e individuales. Tal es así, que encuestas realizadas a pasajeros por Beat, la plataforma de movilidad perteneciente al Grupo Freenow, alianza entre BMW y Daimler, que crece con fuerza en Latinoamérica, demuestran aumentos de más del 21% del uso durante la cuarentena en este tipo de vehículos.

“Las plataformas de movilidad tienen que ocupar un lugar destacado en la pirámide de la movilidad en las ciudades. Tan solo un auto de movilidad compartida puede reemplazar entre 9 y 11 vehículos privados individuales. Esto impacta directamente en la movilidad, pero también en el urbanismo en sí mismo; ya que cuantos menos autos hay en la calle, menos espacios de estacionamiento se requieren” explica la especialista en movilidad urbana Florencia Rodriguez Tourón, en el marco del webinar de movilidad organizado por Beat.

Desde Beat destacan que, en Buenos Aires, las plataformas de movilidad permitieron a las personas continuar en movimiento de una forma segura y económica durante los momentos más estrictos del aislamiento social obligatorio. Tal es así, que el usuario local ha cambiado y estudios de Ualabee & Opinaia demuestran que el 44% de las personas tiene temor a viajar en transporte público, mientras que encuestas realizadas por Beat a sus usuarios plantean que el 31% de ellos planea utilizar su transporte aún más en un contexto pos-COVID-19.

Hoy en día, las personas recurren a este tipo de servicios por tres grandes necesidades: las ocasiones del día a día, las ocasiones de conveniencia y las ocasiones especiales. Dentro de estas categorías, el traslado a los lugares de trabajo ha sido destacada por más del 50% de los pasajeros como la principal causa de utilización del servicio.

En una columna de opinión, Arturo Simone, fundador y CEO de Awto y emprendedor Endeavor, compartió algunas de las variables que impulsan el carsharing más allá de la pandemia. Menciona el bajo contacto (vamos a privilegiar movernos más solos o en grupos muy reducidos) y la flexibilidad: “vamos a privilegiar medios de transporte que permitan cambiar la ruta, los descansos, las paradas, entre otras cosas, y salir cuando queramos y hacia donde queramos”.

“Las aplicaciones de traslado de pasajeros son la clave para alcanzar una movilidad más sustentable, lo que incluye el desarrollo económico de las comunidades. A través de nuestra aplicación, nuestros conductores han generado más de $1500 millones de pesos en ganancias, y recorrido más de 57 millones de kilómetros conectando a las personas” explica Patricia Jebsen, Gerente General de Beat Argentina, quien además agrega que la aplicación ha incorporado en los últimos meses a los taxistas.