En estos días donde las temperaturas son más elevadas, es normal que haya preocupación por la "peluda alegría del hogar". Por eso, en esta nota presentamos diversos consejos para que, aun en caso de que su mascota no dé a notar que está acalorada, pueda darle alternativas que la mantengan hidratada.

 

 

 

1. Que tenga múltiples bebederos

Es importante que tenga agua fresca y limpia a disposición las 24 horas del día, comprobar periódicamente que quede agua en el bebedero, y que el bebedero no esté en pleno sol: en verano es más fácil que el agua evapore o simplemente se caliente y el perro deje de beber por eso.

También se pueden colocar más bebederos en casa, sobre todo cerca de donde descansa el perro. De esta manera, incluso si el perro no se quisiera mover siempre tendría un bebedero cerca. Al salir, tampoco hay que olvidarse de llevar agua y un bebedero portátil cuando van de paseos, de excursión o se hace un viaje en coche con el perro.

 

2. Helados caseros

Se le puede poner algún cubito de hielo en el bebedero. Este no es perjudicial para los perros y si el agua fuera a estar demasiado fría, se le puede dejar a disposición otro bebedero sin cubitos para que elija el agua que le guste más.

Con el hielo también se pueden preparar juguetes caseros. Para hacerlo solo se necesita un molde para helado o un contenedor de plástico, un poco de agua y unos granos de pienso, es decir, los pequeños trozos de comida prensada y deshidratada. Se mezcla el pienso con el agua y cuando el agua se ha congelado, se saca el bloque de hielo, se pasa debajo del agua para que la lengua no se le enganche, y se da al perro.

Eso sí, para este tipo de juego lo ideal es tener un espacio exterior, como una terraza: este juguete casero suele tener mucho éxito entre los perros, pero habrá que limpiar después de cada sesión de juego.

 

3. Que esté protegido del sol

Es muy importante que el perro tenga un lugar fresco y protegido del sol donde descansar, sobre todo en las horas más cálidas del día. Esto se aplica tanto si vive dentro de casa como si solo vive en el exterior.

 

4. Refresca el ambiente

Utilizar un ventilador o el aire acondicionado puede ser una buena medida para bajar la temperatura ambiental.

 

5. Que tenga el pelo mojado

Mojarle sobre todo en la cabeza y en el tronco puede ayudar a bajar la temperatura. Los perros no sudan como las personas y el agua con la que se mojan, al evaporar, provoca un efecto parecido al sudor.

 

 

 

6. Adapta su cama

En verano muchos perros prefieren descansar en el suelo. Podría ser consecuencia de una camita demasiado caliente que no es idónea para el calor del verano.

Si uno busca, se pueden encontrar muchas camas que favorecen la dispersión del calor, como las camas levantadas del piso o las que están hechas de un material transpirable. También hay colchonetas refrigerantes que ayudan al perro a mantener la temperatura corporal. Lo importante es que el perro siempre tenga la posibilidad de elegir dónde colocarse para descansar.

 

7. Cortes de pelo, seguido

Si su perro tiene el pelo largo, recortarlo sobre todo en la panza puede ser otra medida para ayudarle a controlar la temperatura. Lo importante es dejar unos 2-3 centímetros aproximados de longitud, ya que en parte protege del calor y de las quemaduras solares.

 

8. Cepillado también viene bien

Un cepillado frecuente es muy aconsejable para favorecer la muda y retirar los pelos más finos y lanosos, que son los que hacen que tenga calor en invierno.

 

9. No sacarlo a pasear en momentos de calor

Es importante sacar a los perros a pasear en los momentos en los que hace menos calor y evitar que haga ejercicio intenso.

 

10. Darle de comer cuando esté más fresco

Lo ideal es darle de comer en las horas menos cálidas del día, como a primera hora de la mañana o por la noche.