"Instagram: 'Eliminamos la cuenta de Pornhub...' Tengan un buen fin de semana", celebró Laila Mickelwait, fundadora del movimiento "Trafficking Hub", que está en pie de guerra contra la plataforma pornográfica por las múltiples denuncias de contenido falso, violento y de menores en la plataforma. De esta manera, se acrecienta la presión sobre Pornhub y otros sitios para hacer una profunda curación de su contenido ilegal, pero las soluciones son pocas y las tensiones, muchas.

La cuenta de Pornhub tenía más de 13 millones de seguidores y alrededor de 6.200 publicaciones cuando se eliminó. Naturalmente, ninguno de sus posteos tenía contenido pornográfico, ya que violaría la regla de cero desnudez que tiene la red social. Por eso, entonces, no quedan claras las razones de la eliminación de la cuenta. 

En este sentido, la captura de pantalla de la activista anti-Pornhub no da detalles sobre las políticas infringidas, cuándo se infringieron y qué contenido incitó a la plataforma a actuar. Hasta ahora, ni Instagram ni Meta (su empresa matriz) dijeron algo al respecto.

La guerra contra el contenido adulto

Pornhub todavía mantiene cuentas muy populares en Twitter y YouTube, donde tiene 3,4 millones de seguidores y 882.000 suscriptores, respectivamente. Sin embargo, no se descarta un posible cierre de estas cuentas en el futuro cercano.

Forbes explicó que la presión sobre las grandes plataformas tecnológicas para que actúen ante la creciente avalancha de contenido ilegal en línea, que es cada vez más grande. ¿Por qué? Material como la pornografía infantil, los deepfakes (una epidemia creciente) y la pornografía vengativa se multiplicaron en los últimos años, justo cuando los sitios luchan por controlar el contenido violento, engañoso y falso.

 

A pesar de los aparentes mejores esfuerzos de las grandes tecnológicas, los problemas se mantuvieron, aunque las empresas intensificaron sus esfuerzos para limpiar sus plataformas con medidas que incluyen la prohibición de cuentas y la suspensión de sitios de alojamiento

Como explicó BAE Negocios, detrás de las campañas contra PornHub (que ha hecho muy poco por verificar el contenido que se sube a sus servidores) hay presiones de grupos religiosos que decididamente quieren ilegalizar la pornografía. Incluso, tras la medida de las tarjetas, el sindicato de actores pornográficos (APAG, Adult Performance Artist Guild) tuvo reuniones con legisladores porque su trabajo está en peligro.

Todavía no hay solución

Pese a todo esto, todavía falta mucho. El problema está lejos de solucionarse, y hasta ahora ni los gigantes tecnológicos ni las propias plataformas acusadas encuentran respuestas. Pornhub, ahora en tela de juicio, ya tuvo dos altos ejecutivos que renunciaron por un escándalo de videos de menores de edad. La empresa eliminó 10 millones de videos después de que PayPal, Visa, Mastercard y Discover cortaran los pagos en la plataforma, pero tampoco alcanzó.

Lo mismo pasó con OnlyFans: la plataforma en donde se paga a creadores por contenido —en su mayoría, erótico y pornográfico— intentó prohibir todo lo relacionado con lo sexual después de que los principales bancos presionaran para no verse atados a posibles denuncias por contenido ilegal. Tampoco pudo: el rechazo fue tal que tuvieron que dar marcha atrás.

Hasta Twitter buscó copiar el modelo OnlyFans, pero eliminar el contenido ilegal era una inversión tan costosa que lo descartaron, según reveló una investigación de The Verge.

Visa y Mastercard ya suspendieron los pagos por compras de anuncios en Pornhub. Ambas empresas fueron acusadas de facilitar a sabiendas la difusión de pornografía infantil en Pornhub como parte de una demanda contra el dueño del sitio, MindGeek. Las empresas de pago no están de acuerdo con la denuncia. ¿Con la pornografía ilegal? Eso es, todavía, un terreno difuso