El Día Mundial de la Rabia, que se conmemora cada 28 de septiembre, recuerda la importancia de prevenir una enfermedad viral que continúa siendo un desafío para la salud pública. La rabia afecta a todos los mamíferos, se transmite principalmente por mordeduras y provoca alrededor de 60 mil muertes humanas cada año. Su letalidad es prácticamente absoluta, con una tasa de mortalidad del 99% en animales y personas una vez que aparecen los síntomas. Sin embargo, se trata de una enfermedad 100% prevenible mediante la vacunación anual de perros y gatos.

En Argentina, el Ministerio de Salud de la Nación advirtió un incremento en los reportes de mordeduras de perros en los últimos años. Los niños menores de 10 años resultan las principales víctimas de ataques graves debido a su baja estatura y la forma en que interactúan con los animales. Además del riesgo de rabia, las mordeduras pueden generar infecciones bacterianas, fracturas, cicatrices permanentes y secuelas emocionales prolongadas.

Frente a este panorama, especialistas subrayan tres medidas esenciales: educar a los niños en el trato responsable hacia los animales, acudir de inmediato a un médico o centro de salud ante el contacto con un animal sospechoso y garantizar la vacunación anual de perros y gatos. “Debemos seguir luchando contra esta enfermedad y controlándola mediante la vacunación en los animales, que es la forma más eficaz, segura y económica para hacerlo”, afirmó el médico veterinario Leandro Martínez Melo.

La vacunación no solo protege a cada animal, sino que actúa como un escudo colectivo contra la propagación del virus, con impacto directo en la salud pública y la seguridad familiar. En esa línea, organizaciones como la Fundación Mundo Sano desarrollan operativos que incluyen campañas de inmunización, talleres educativos y actividades comunitarias. Solo en lo que va del año, la fundación logró vacunar a más de 900 animales en distintas provincias, con intervenciones en localidades como Añatuya y Pampa del Indio, donde el acceso sanitario resulta limitado.

Estas jornadas refuerzan la conciencia sobre el cuidado responsable de los animales y la necesidad de cumplir los calendarios de vacunación y tratamientos preventivos. Cada tutor de perros y gatos desempeña un rol fundamental como garante de la salud de sus animales y de las personas con quienes conviven.

En el Día Mundial de la Rabia, el mensaje es claro: la vacunación salva vidas. La meta global de alcanzar “cero muertes humanas por rabia para 2030” requiere políticas públicas sostenidas y un compromiso individual firme. La prevención está al alcance y depende de la responsabilidad colectiva.

Recomendaciones ante una mordedura sospechosa de rabia:

• Lavar de inmediato la herida con abundante agua y jabón.
• Consultar en el centro de salud para evaluar el tratamiento (antibióticos, vacuna antitetánica y profilaxis antirrábica).
• Observar al animal durante 10 días si es posible aislarlo.
• Cumplir con la vacunación anual de perros y gatos desde los tres meses de edad.
• Evitar el contacto directo con murciélagos y comunicar su presencia a un centro de zoonosis.