Mes del Cáncer de Mama: cómo acompañan las empresas a sus empleadas diagnosticadas
Testimonios en primera persona y consejos para una detección temprana
Pocas semanas antes de las fiestas, en 2007, Claudia Berra, tripulante de American Airlines, fue a realizarse un control de rutina. Cuando le estaban realizando la ecografía, la doctora vio algo que, aunque era pequeño, no le gustó. Hoy agradece que esa especialista haya confiado en su intuición. Después vinieron más estudios y el diagnóstico con la noticia menos deseada. Ahora, afortunadamente recuperada, como sobreviviente del cáncer de mama se involucra en campañas para incentivar la prevención. Para ella, como para muchas mujeres, fue fundamental la detección temprana y el apoyo que le dieron desde la compañía en la que trabaja.
Según las últimas estimaciones realizadas por la Agencia Internacional de Investigación sobre Cáncer (IARC) en base a datos disponibles a nivel mundial para el año 2018, Argentina presenta una tasa de incidencia de 212 casos por 100.000 habitantes. Esta cifra la posiciona dentro de los países del mundo con incidencia media-alta (rango 177 a 245,6 por 100.000 habitantes), ubicándonos en el séptimo lugar en Latinoamérica. Según las estimaciones de incidencia del Observatorio Global de Cáncer de la OMS, en el país, este tipo es el de mayor magnitud en cuanto a ocurrencia, con un volumen de más de 21.000 casos al año, representa el 17% de todos los tumores malignos y casi un tercio de los cánceres femeninos.
En este sentido, durante todo el año pero especialmente durante este Mes del Cáncer de Mama, muchas empresas en el mundo y en nuestro país trabajan en campañas que abordan esta temática: implementan jornadas de capacitación, eventos y realizan donaciones a hospitales.
La Fundación AVON, por ejemplo, lanzó el sábado #CHEQUEÁTUSPECHOS una nueva campaña para promover el derecho de las mujeres a cuidar su salud mamaria y tener tiempo para realizarse los controles de rutina.
Silvia Villar es profesora de plástica y trabajaba en un colegio privado cuando se enteró que tenía cáncer de mama. "Llegué al diagnóstico porque me di cuenta de que el bultito que tenía hacía dos años había crecido muy de repente y mi pareja me insistió que fuera al médico", cuenta y destaca la importancia de la detección a tiempo: "Hay que hacerse los controles. Si tenés miedo, que te acompañe una amiga o tu pareja". Según recuerda, cuando les contó a sus jefas, se descolocaron en un principio pero después la acompañaron con la mejor predisposición, al igual que sus colegas. "Es importante acompañar al paciente desde la empatía, ponerse en el lugar del otro, no complicar al paciente con burocracia", dice.
En los dos casos destacan la contención brindada por la empresa y por los compañeros. "En el ámbito laboral fui muy apoyada ya que después de la operación venía tratamientos más largos lo cual por lo trabajo me impedía volar. En mi trabajo estaba muy expuesta a cambios de horario o personas que con un simple resfrío me podían contagiar y al estar con las defensas muy bajas no podía arriesgar nada, además tampoco hubiera tenido las fuerzas para hacerlo. Mis colegas fueron maravillosos", señala también Claudia y destaca: "Las compañías deberían tomar más conciencia y no sólo acompañar sino también estar presentes para ayudar a prevenir. En el caso de American Airlines, durante el mes de octubre, todo se tiñe de rosa, bajo el lema BE PINK todos los empleados nos vestimos con algún accesorio rosa".
El consejo de Claudia para quienes son diagnosticadas es no preguntarse "¿Por qué a mi?" y no dudar en pedir ayuda y cariño a sus seres queridos. Para todas, recomienda hacerse los controles sin miedo: todo con tiempo es mucho mejor y más porcentaje de curación hay. "Se puede dar batalla y salir, de esto doy fe , después de 10 años ya estoy libre de cáncer, sólo requiere paciencia porque es largo, actitud positiva y amar la vida", agrega.
Silvia, en tanto, sugiere "buscar las cosas que a una le hacen bien, una película, las amigas, salir a caminar, tener un proyecto". En el caso de ella, volvió a pintar después de la quimioterapia. Además es voluntaria en la fundación Macma (Movimiento ayuda de cáncer de mama) y tiene un programa de radio con dos amigas todos los martes: "Macma con vos". "No somos mujeres maravilla que podemos con todo, somos maravillosas por ser simplemente mujeres. No hay que dejar de cuidarnos", concluye.