¿Qué chances tienen los jubilados de cobrar un bono de $110.000?
El Congreso aprobó una suba del 7,2% para las jubilaciones y un nuevo bono para quienes cobran la mínima. Pero el Gobierno amenaza con vetar la ley y judicializar su aplicación. Claves de una agenda aún incierta
¿Los jubilados van a cobrar un bono de $110.000 en agosto? La pregunta tiene respuesta parcial, atravesada por la pulseada entre el Poder Ejecutivo y el Congreso. El proyecto de ley que contempla ese refuerzo fue aprobado por el Senado la semana pasada. Pero el presidente Javier Milei ya advirtió que lo vetará, con el respaldo explícito del ministro de Economía, Luis Caputo. Si el Congreso insiste y reúne los dos tercios de los votos en ambas cámaras, el Gobierno deberá aplicar el aumento, aunque anticipó que recurrirá a la Justicia.
La norma aprobada establece una suba del 7,2% para todos los haberes previsionales, además de una actualización del bono que perciben quienes cobran la jubilación mínima. Ese refuerzo —fijado en $70.000 desde hace meses— pasaría a ser de $110.000, con impacto proporcional para quienes superen el haber mínimo y sin aplicación para quienes ya cobran la jubilación máxima.
Con el esquema actual, el haber mínimo es de $309.294,79. Al sumarle el bono vigente, el total mensual asciende a $379.294,79. La nueva ley elevaría el haber a $331.111,79 y llevaría el bono a $110.000, con un ingreso mensual final de $441.564. Se trata de un aumento del 16,4% para el sector más rezagado del sistema.
Los cambios también afectarían al haber máximo, que hoy se ubica en $2.081.261,17 y pasaría a $2.231.111 con el incremento del 7,2%. La suba quedaría limitada al monto base, sin refuerzo adicional.
La mejora alcanza además a la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM), que pasaría de $247.436 a $317.436, y a las pensiones no contributivas, que se ajustan en función del haber mínimo.
La principal traba es política: si Milei veta la ley, el Congreso deberá reunir una mayoría calificada para sancionarla de manera definitiva. En ese escenario, el Ejecutivo podría judicializar su aplicación, como ya advirtió. Por ahora, el calendario de pagos de agosto no contempla los nuevos montos. La definición queda en suspenso, con los jubilados pendientes de un conflicto de poderes que vuelve incierta la aplicación del mayor aumento del último año.
