¿Qué letra representaba a cada provincia cuando las patentes de los autos eran por distrito en Argentina?
Antes de que se estableciera el sistema unificado de patentes, cada provincia tenía una letra distintiva en las matrículas de los vehículos. Este método facilitaba la identificación, pero también generaba restricciones en la comercialización y transferencia de autos. ¿Cómo funcionaba y qué impacto tuvo en la industria?
Antes de la implementación del sistema de patentes unificado, en Argentina los vehículos llevaban matrículas con una letra inicial que identificaba la provincia donde estaban registrados. Este sistema, vigente durante décadas, facilitaba el control de tránsito y la identificación de vehículos en cada distrito, aunque también generaba ciertas limitaciones para quienes trasladaban sus autos a otras jurisdicciones.
Cada provincia tenía asignada una letra específica: por ejemplo, la "C" correspondía a la Ciudad de Buenos Aires, la "B" a la provincia de Buenos Aires, la "R" a Santa Fe y la "X" a Córdoba. Algunas provincias menos pobladas contaban con identificadores poco conocidos, como la "J" para San Juan o la "T" para Tucumán. Este esquema permitía a las autoridades detectar irregularidades más fácilmente en rutas nacionales.
El sistema se modificó a fines de los años 90 con la introducción de las placas alfanuméricas estandarizadas, en línea con las recomendaciones del Mercosur. La nueva modalidad eliminó la identificación provincial y permitió un sistema más flexible para la comercialización de autos usados y la radicación de vehículos en diferentes puntos del país.
La estandarización de las matrículas tuvo un impacto económico en la industria automotriz y en el comercio de vehículos, ya que permitió una mayor fluidez en la compraventa de unidades entre provincias. Antes de este cambio, los trámites de transferencia eran más complejos y requerían la readecuación de la patente a la jurisdicción correspondiente.
Hoy en día, el sistema unificado sigue vigente, aunque con mejoras en los mecanismos de identificación digital y nuevas medidas de seguridad en las placas. Además, algunos países del Mercosur ya comenzaron a implementar patentes electrónicas, lo que podría marcar la próxima evolución del sistema en Argentina.