Las impresiones 3D, un anticipo de Viaje a las Estrellas
Redescubriendo el mañana
Desde mediados de 1966 los seres humanos imaginaban que podrían existir máquinas que imprimen cualquier tipo de elemento que uno desee. La serie televisiva "Star Trek" plasmó el siglo pasado como en tan solo apenas unos segundos se podía imprimir una bandeja de comida completa.
Hoy en día hace falta mucho más que unos segundos, pero sabemos que es posible que las impresoras 3D puedan realizar cualquier objeto, desde muebles hasta órganos humanos como es el caso del corazón. Hace tan solo unos meses, un grupo de científicos ha ido más allá con los materiales a utilizar en las impresoras y lograron crear el primer corazón humano.
Para poder llevar adelante el proyecto usaron célula y material biológico del propio paciente que podría usarlo. Se cree que a medio plazo el nuevo descubrimiento revolucionó el ámbito de los trasplantes.
Por el momento, al producto que se llegó es a un corazón parecido al de un conejo, por su tamaño. La prometedora técnica podría hacer que según estos expertos tengamos corazones impresos en 3D válidos para transplantes humanos en unos 10 años.
A pesar del miedo que a veces le tenemos a los avances tecnológicos y la posible dominación de lo tecnológico sobre lo natural, hay que tener en cuenta que se pueden implementar hasta tal punto que pueden llegar a salvar vidas.