Premios y nominaciones para los destacados del año

Eduardo De Simone

Las listas y nominaciones que destacan lo mejor de una producción anual, tanto en el jazz como en otros géneros, suponen elecciones arbitrarias y a menudo dictadas por los cánones de la tradición y la difusión comercial. Pero a pesar de ello los críticos de los medios especializados no abandonan su exigencia a la hora de premiar con su voto a discos y artistas en un determinado período.

No es casualidad entonces que muchas votaciones de críticos coincidieran con las nominaciones a los Grammy en los distintos rubros de jazz. Sobresalió claramente el último trabajo de Wayne Shorter, Emanon, una producción sofisticada y de tintes futuristas que este legendario saxofonista lanzó en 2018 y que se llevó el Grammy al mejor álbum instrumental, así como encabezó la votación de los críticos de la revista JazzTimes a los discos más destacados del año.

La coincidencia también alcanzó a la cantante Cécile McLorin Salvant, quien se alzó con el Grammy a la mejor producción de jazz vocal y quedó quinta en la votación de los especialistas de JazzTimes con su disco The Window, editado por Mack Avenue.

Un caso particular es el del trompetista Ambrose Akinmusire, que secundó a Wayne Shorter en la elección de JazzTimes y mereció la portada de otras dos publicaciones destacadas del género: la francesa Jazzmagazine y la italiana Musica Jazz.

Su último disco, Origami Harvest, el cuarto que graba para Blue Note, muestra a este músico disruptivo, que fue lanzado a la fama en 2008 por el sello FreshSound, en una faceta que cautiva a muchos al combinar la tradición de la música negra con elementos de hip hop, funk, soul y fundamentalmente conceptos con marcado sesgo político. El racismo estructural de la sociedad norteamericana y la hostilidad de las elites con los sectores más vulnerables son capítulos que aborda Akinmusire en su nuevo trabajo, que cuanta con la participación del rapero Kool AD y de los músicos de jazz Sam Harris en piano, Marcus Gilmore en batería, Walter Smith III en saxo y Michael Aarberg en teclados, así como un ensamble de cuerdas.

La revista norteamericana DownBeat lo lista entre sus contadas "Masterpieces", álbumes con cinco estrellas, condición que sólo reúnen cinco trabajos. Lo secunda en esa nómina otro disco también valorado por el resto de las publicaciones: Concentric Circles, del quinteto del veterano pianista Kenny Barron, quien a sus 75 años se mantiene altamente vigente, con una inigualable intensidad expresiva.

¿Y qué eligieron los críticos franceses? Además de coincidir con la coronación de Akinmusire, destacaron al acordeonista local Vincent Peirani, quien se luce con su nuevo disco Living Being II, editado por el sello ACT y también al pianista Marc Copland, que brilla con su reciente solo piano Gary, dedicado al contrabajista Gary Peacock.

En las publicaciones italianas sobresale una perla de un sello local: un show en vivo de Sheila Jordan en Castellanza, grabado en 2016 y editado por Abeat. La acompañan Roberto Cipelli en piano, Attilio Zanchi en contrabajo y Tommy Bradascio en batería. Lucky to be me, tal el título del disco, muestra a la cantante vital y encantadora.

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