Un policial belga al estilo de Pecados Capitales
Con éxito en el mercado europeo, llega esta serie sobre crímenes en nombre de la “justicia divina”
No todo es Noir escandinavo. Las series belgas también logran llamar la atención con varias producciones destacadas en formato de policiales. En los últimos tiempos, Tabula rasa y La trêve fueron dos de las historias que conquistaron a la audiencia internacional. En esa línea, una nueva propuesta, 13 mandamientos, busca posicionarse en este pelotón que logra un lugar propio en la abrumadora oferta de contenidos de streaming.
La serie, que ya se estrenó el año pasado en Europa (donde se convirtió en uno de los dramas criminales más discutidos y logró éxito particularmente en el mercado inglés) desembarca hoy en Netflix.
La historia tiene como protagonista a una dupla de detectives. Un investigador veterano y hosco, Peter (Dirk van Dijck), empieza a trabajar con una nueva compañera Vicky (Marie Vinck), que es ex oficial de élite pero debió abandonar las fuerzas especiales debido a las secuelas de un accidente. Juntos deberán atrapar a un justiciero aficionado a la tortura que encuentra inspiración en los Diez Mandamientos bíblicos.
La asociación con la película Pecados Capitales (Seven, de David Fincher, protagonizada por Brad Pitt y Morgan Freeman) resulta inevitable. Allí, los asesinatos tenían una puesta inspirada en la lista de faltas. La serie belga se hace cargo desde el principio de esa resonancia: cuando aparece el primer caso algunos de los policías hacen referencia directa al film.
Hablada en flamenco (dialecto derivado del holandés que se utiliza en buena parte de Bélgica), la serie tiene un comienzo bastante convencional, hasta podría parecer algo trillado para quien vio muchos policiales, pero con el correr de los capítulos se va complejizando, manteniendo siempre la atmósfera sombría del policial negro. Para parte del público, la trama puede acabar resultando un poco retorcida.
El criminal que desconcierta porque tortura a las víctimas, en algunos casos casi hasta la muerte, pero las salva al final se proclama como un Mesías que actúa para despertar conciencias. Se entablará un juego macabro y anticipatorio en el que la prensa tendrá también su rol.
Las subtramas vinculadas a los personajes, en el caso de Vicky a sus lesiones de espalda y otras consecuencias del choque, en el caso de Peter una hija adolescente con problemas, son parte de los atractivos de la historia.
El elenco de esta serie, que como no podía ser de otra manera tiene 13 episodios, se completa con Karlijn Sileghem, Bert Haelvoet, Tom Ternest, Ella Leyers, Line Pillet, Katelijne Verbeke, Lola Rose Delany y Gökhan Girginol.
Despertar
Los medios europeos atribuyen el incipiente éxito que están mostrando las tiras belgas a dos factores. Por un lado, el aspecto técnico, con unos equipos de producción de altísimo nivel, curtidos en numerosas producciones de series británicas que prefieren rodar en Bélgica por temas de ayudas fiscales y menores costos. Por otro, el decidido apoyo de los dos gobiernos regionales belgas, el flamenco y el valón, para fomentar las producciones televisivas.
Una prueba reciente del buen momento es la serie Undercover, producción en la que participaron Bélgica y Países Bajos junto a Netflix y fue seleccionada entre las diez participantes de la primera edición del festival de series de Cannes.
En lo que al estreno de hoy respecta, aún con algunos desaciertos y falencias a nivel argumental, 13 mandamientos es una serie interesante, otro producto de calidad de una avanzada belga que es toda una promesa audiovisual.