Biocombustibles: el Gobierno avanza con proyecto propio y la industria quiere prórroga
Según remarcaron los fabricantes de biodiésel y bioetanol, el borrador del oficialismo buscará reducir los actuales porcentajes de mezcla con naftas y gasoil. La industria busca aprobar en Diputados una extensión del régimen actual
El Gobierno presentó los lineamientos generales para una nueva ley de biocombustibles, que generó preocupación en esa cadena de valor. Según el borrador de la normativa oficial, al que pudo acceder BAE Negocios, se establece una reducción en los porcentajes de corte con nafta y gasoil y establece un mayor protagonismo para las pymes. Los fabricantes piden que se prorrogue la actual Ley 26.093, cuya vigencia finaliza en mayo y en paralelo, legisladores de la oposición solicitaron que se lleve a cabo una sesión extraordinaria el próximo jueves 25, para debatir sobre su extensión.
El secretario de Energía, Darío Martínez, expuso ante la Comisión de Energía en la cámara baja y plantó bandera sobre la necesidad de tratar una nueva legislación, que aborde los cambios que el mercado experimentó en los últimos años y que proteja a las pequeñas y medianas empresas del sector. En un tramo de su exposición, el funcionario alegó que "hay que definir un cupo de precio y corte para esos sectores, pero al tiempo ir analizando una libre competencia y generar los espacios para que eso se dé".
Más allá de los rumores, el único hecho concreto –al menos hasta que se haga oficial una nueva normativa- es el proyecto de ley presentado por la senadora santafesina María de los Ángeles Sacnun, que prevé una extensión de cuatro años a la actual normativa, y que cuenta con media sanción en el Senado.
“Es un proyecto realizado sin siquiera consultar a todas las partes involucradas", advirtió Patrick Adam, director Ejecutivo de la Cámara de Bioetanol de Maíz. El directivo remarcó que esperan la sesión del próximo 25 de marzo para un debate más amplio, para buscar una solución definitiva a este tema. En el caso del bioetanol de maíz, que se utiliza para el corte de naftas a un 12%, Adam señaló que se busca bajar su porcentaje de mezcla a 10%, situación que tendrá un impacto visible en la provincia de Córdoba.
En el caso del bioetanol, el borrador del proyecto establece que las petroleras deberán adquirir el 6% a las empresas productoras de este insumo en base a caña de azúcar; el 2,5% a pymes y cooperativas que trabajen en base a maíz y el 1,5% restante podrá ser adquirido sin restricción de cupo y precio.
Por el lado del biodiésel, elaborado a base de aceite de soja, el proyecto del oficialismo apuntaría –según el borrador de la normativa- a bajar su porcentaje de corte del actual 10% al 5%. Según señaló Luis Zubizarreta, presidente de Acsoja, la posibilidad de esta rebaja “generó una reacción de la industria, que pide una prórroga de la actual ley y tiempo para debatir una nueva, estamos alineados en que necesitamos una legislación superadora”.
El texto que podría convertirse en ley también define cual es el formato de pymes. En el caso de biodiésel, no debe superar las 50.000 toneladas de producción anual, mientras que en bioetanol no debe exceder los 90.000 metros cúbicos, entre otros requisitos.
Fuentes vinculadas a la industria de ese biocombustible remarcaron que, más allá de la incertidumbre por los porcentajes de corte, “es positivo que se haya instalado el tema al máximo nivel”. En tanto, desde la Cámara de Empresas Pymes Regionales Elaboradoras de Biocombustibles (Cepreb), ante una consulta de este medio expresaron su postura a favor de la ley vigente, al entender que ha “demostrado una influencia positiva en aspectos como el empleo, la promoción de combustibles amigables con el medioambiente y el fomento de la industria pymes nacional”